Cibeles, qué guapa estás
Una Liga para enmarcar.- Hace dos años el AS lanzó un precioso libro dedicado a la increíble 14 titulado ‘Una Champions mágica’. Pues esta Liga, la 36, merecería otro libro por la grandeza del título y la capacidad de este equipazo para superar todas las dificultades que han ido apareciendo desde la primera hoja del calendario, allá por el mes de agosto. Ancelotti es el maestro de ceremonias de una plantilla que se mueve como un acordeón en torno a su ‘Pater Familias’. Un pedazo Liga en la que van a quedarse cerca de esos 100 puntos que marcaron como récord el Madrid de Cristiano y el Barça de Messi. Pero esta Liga tiene más mérito. Aquí no hay ningún súper galáctico ni ningún Rey Sol con botas. Aquí hay 23 profesionales que cada mañana se van a entrenar a Valdebebas dando gracias al destino por permitirles defender este escudo sagrado, forjado en la política del esfuerzo innegociable y el compromiso ilimitado hasta llegar al fanatismo por defender la causa del mejor equipo del Siglo XX y del XXI. Jugar en el Madrid es un privilegio y así lo entienden estos chavales. Si se lesiona Courtois, Lunin hace paradas tremendas. Si Carvajal sufre un resfriado aparece Lucas Vázquez y parece Garrincha (que se lo digan al Barça en el Clásico). Si se lesiona Militao, irrumpe Rüdiger y se gana el corazón de sus compañeros y de toda la afición con su empatía y alta fiabilidad. Aterriza un chaval de 19 años, Bellingham, que se enamora del Madrid tras darle calabazas al City y al Liverpool, y firma una tarjeta digna de un goleador nato, cambiando los Rolling Stones de la ‘Xavineta’ por los Beatles del ‘Hey Jude’ del nuevo y ultramoderno Bernabéu. Este Madrid imperial es campeón de campeones. No se le puede un solo pero... Un CAMPEÓN CON MAYÚSCULAS.
Ancelotti supera a Zizou.- Los 11 títulos de Zidane parecía que tardarían en ser superados, pero con el genio de Reggiolo era más que previsible. Esta Liga es su título número 12, una vez sumados los ganados en su primera etapa (5) y los siete de esta segunda y espléndida andadura. Sólo le quedan dos para alcanzar los 14 de Miguel Muñoz... que estuvo en el cargo 14 años. Si gana la 15 ya nadie duda que pronto se convertirá en el técnico más laureado de la historia del club. Grande, Carlo.
Factor Courtois.- Han sido nueve meses sin el mejor portero del mundo. Un parto con dolor, al que se añadió la lesión de menisco cuando ya le veíamos volando de palo a palo en el cruce ante el City. Pero el gigante belga es un ganador hasta en las recuperaciones de las lesiones más graves que pueda padecer un futbolista. Supo sufrir y esperar en esas sesiones interminables de Valdebebas con los fisios. Tibu regresó a casa como si nunca se hubiese ido. Ese mano a mano parado de forma brutal a Chris Ramos puso al Bernabéu en pie. Iban 0-0 en ese momento. Eso hacen los grandes porteros: salvar goles que luego cambian el resultado final. Tibu, bienvenido de nuevo al Paraíso del fútbol.
Todos a Cibeles.- Aunque el club prefiera tener una prudencia institucional pensando en el partidazo del miércoles con el Bayern, vi normal que Cibeles se viera invadida por miles y miles de madridistas deseosos de celebrar este ‘Ligón’ como merece. Mientras que el Barça del ‘Nadaplete’ festejó la continuidad de Xavi como si fuese un título a pesar de que ahora mismo están fuera del Mundial de Clubes y de la Supercopa de España, el Madrid ha hablado en el campo, que pone a cada uno en su sitio. ¡CAMPEONES, OÉ!