Asencio, por fin llega tu turno, crack
Canterano, valiente como pocos, veloz como un guepardo, mentalmente una roca. Un chaval con ADN blanco, que siempre está dispuesto a apagar el fuego allá donde irrumpe. Es su hora...

En el Madrid no hay excusas. Ni escondites. Ni coartadas. Las lesiones forman parte del fútbol profesional y cuando llegan toca apechugar y buscar en ese fondo de armario donde a menudo aparecen jabatos dispuestos a honrar el escudo por encima de lo razonable. Uno de esos es Raúl Asencio. Canterano. Comprometido. Valiente como pocos. Veloz como un guepardo. Mentalmente una roca sin fisuras. Un chaval con ADN blanco, que ya alimentó en su añorada tierra grancanaria. Asencio es un central de guardia que siempre está dispuesto a apagar el fuego allá donde irrumpe. Un lujo para una plantilla tan exigente como la de su amado Real Madrid.
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La lesión de Militao (otro problema para Xabi al ser el jefe de la zaga en este arranque de curso), la sobrecarga muscular de Huijsen (Dean puede jugar, pero con precaución para no romperse) y el regreso de Rüdiger (con prudencia para ir poco a poco) obligan al técnico tolosarra a apostar por Asencio de inicio en las exigentes salidas de estos próximos días en Elche (la apuesta de Eder Sarabia está funcionando), Atenas (ojo al Olympiacos de Mendilibar) y Montilivi (el Girona de Míchel no va a regalar nada). Y después llegará San Mamés, donde ya se ha matriculado Asencio.
No olviden que el canario ‘toreó’ con notable alto el curso pasado en el Metropolitano y en Anfield, en dos difíciles exámenes de Champions donde se ve el que vale y el que no. El chaval ha sabido asumir en silencio estas últimas suplencias al estar Huijsen y Militao por delante. Pero que nadie olvide que ante la Juventus evitó el empate cerca del final y que en Vallecas fue el mejor de la defensa blanca. Asencio es de los nuestros. Es tu turno, campeón.





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