Ángel o demonio
Tengo un ángel sobre el hombro derecho que me dice que sea optimista y que la victoria ante el Betis nos abre la puerta de la esperanza, pero en el izquierdo tengo un demonio que me dice ¡cuidado! no es más que una victoria por la mínima y el juego mejoró... pero no tanto. Esta campaña está siendo complicada por los resultados sí, pero más por la sensación de escaso potencial que muestra el Real Valladolid, por ello es necesario disfrutar de cada victoria y celebrarla como se merece, pero sin caer en la confianza o la euforia.
Las cifras dicen que el Valladolid es el que más puntos ha sumado en la últimas cinco jornadas de los seis equipos que están abajo, pero sigue en puestos de descenso y sigue siendo el más goleado y el que menos marca. De hecho solo ha dejado la portería inmaculada en cinco partidos, todos en casa, las tres victorias 1-0 y dos empates ante Leganés y Real Sociedad.
La mano de Cocca ha tardado en notarse y por el camino han quedado dos fiascos ante Girona y Ourense, lo que puso el foco ya de una manera definitiva en los jugadores que respondieron corriendo sin parar ante el Betis, lo que sin duda ayudó a la victoria. En ese partido esos famosos brotes verdes llegaron con la solidaridad del equipo, el trabajo colectivo y la aparición de jugadores importantes como Marcos André y Kike Pérez. Pero muchas veces juzgamos los partidos en función de los resultados y la felicidad de ganar pudo ocultar que el Valladolid volvió a terminar encerrado y sacando algún balón bajo palos. A diferencia del partido ante el Valencia, esta vez el equipo buscó salir y hacer peligro y no convertirse en un frontón, eso es bueno y positivo.
No se trata de ser agorero o cenizo, pero tampoco bajar la guardia y pensar que todo el monte es orégano. Quiero ver la respuesta del equipo en Cornellá-El Prat el viernes. El Espanyol tiene la misma necesidad que el Pucela y están preparando una encerrona, pero no pudieron ganar a Valencia o Leganés en estas últimas jornadas en su estadio. Los nervios y la tensión están instalados y la ventaja es que el equipo blanquivioleta llega con el refuerzo de haber ganado... o con la relajación que provoca la lisonja de esta semana.
El ángel o demonio permanente, creer y apoyarse en lo bueno o volver a caer en lo de antes. La prueba de fuego es este viernes y después semana a semana, opciones hay pero cada partido será una situación límite y los jugadores deben saberlo y usarlo a su favor. ¿Quién ganará? espero que el ángel...
Sigue el canal de Diario AS en WhatsApp, donde encontrarás todo el deporte en un solo espacio: la actualidad del día, la agenda con la última hora de los eventos deportivos más importantes, las imágenes más destacadas, la opinión de las mejores firmas de AS, reportajes, vídeos, y algo de humor de vez en cuando.