Al Khelaïfi, un tufo permanente
Tramas. No está siendo el mejor presidente en lo deportivo (cero Champions) ni en lo económico (pérdidas millonarias), pero lo de Nasser Al Khelaïfi en París va más allá. Todo lo que le rodea huele a podrido. Esta semana saltó el lío de la extorsión a un empresario que estuvo 10 meses preso en Qatar y el del tráfico de influencias con expolicías que le ayudaban a obtener información privilegiada. Son más capítulos para su colección de escándalos. Un pozo sin fondo.
Poder. A este camino de dudosa ética hay que sumar lo concerniente al fútbol. Su conexión con la UEFA, interesada contra la Superliga, le llevó a ser presidente de la ECA (Asociación de Clubes) y a evitar sanciones como la que mereció por el altercado en el palco del Bernabéu. Las turbulencias por el caso Mbappé, las críticas partidistas a las palancas del Barça, la poca deportividad en general en la derrota... Son señas de identidad de un directivo con ínfulas de ministro. Así le va.
Cambio. El fin de semana vuelve a lo grande en la Premier con un derbi de Mánchester. Seguramente sea la vez en la historia en la que más adelantado cabalga el City respecto al United. Ahora mismo no hay color. Ha ganado cuatro de las últimas cinco Premier, mientras que su rival de la ciudad se ha ido hundiendo irremediablemente. Los nostálgicos saben mejor que nadie que esto siempre fue al revés: ocho ligas ha ganado en su historia el City por 20 del United, el que más de Inglaterra. Guardiola tiene mucha culpa del cambio de tendencia actual.
Hola Qatar. Se acerca el Mundial y con ello el debate sobre las primas. Históricamente hubo escándalos como los de las selecciones africanas que llegaron a negarse a jugar el torneo, aunque luego siempre accedieron. Ocurrió con Camerún en Brasil 2014, por ejemplo. Esta vez, la primera en anunciar un acuerdo para Qatar ha sido Alemania. Cada futbolista recibirá 400.000€ si es campeón y 200.000 si es subcampeón. Cifras tremendas que luego los jugadores africanos, y cualquiera, quieren emular. Imposible.
Hoy descubrimos a… Jewison Bennette (2004). El parón de selecciones nos dejó la agradable irrupción de este zurdo costarricense que logró un doblete ante Corea del Sur y que amenaza con dar guerra a España y Alemania en el Mundial. Fichado este verano por el Sunderland inglés, con el que ya ha debutado en Championship, ha disparado la ilusión en Costa Rica. Con 18 años nadie duda de él: aquí hay jugador para muchos años.