Ediciones
Resultados
Síguenos en
Hola

En el fútbol europeo, el mercado de fichajes de invierno suele ser menos activo que el de verano, pero el de esta temporada promete. Manchester United, Manchester City, Milan, Real Madrid, Atlético... podrían mover sus plantillas para conseguir sus objetivos. También equipos como el Valladolid, Valencia y Espanyol se juegan mucho. Y por lo visto en la Copa del Rey, otros también. Lo tienen difícil, pero hay margen para milagros. Los pericos ya lo hicieron en la temporada 2003-04. Tenían 11 puntos en la primera vuelta, a ocho de la permanencia. Al igual que el Valencia, también cambiaron de entrenador, sustituyeron a Javier Clemente por Luis Fernández. En enero llegaron el rumano Raducanu y el marroquí Hadji. Sumaron 29 puntos en 19 partidos y se salvaron en la última jornada, incluida una cacerolada la noche anterior del partido en el hotel de concentración del Murcia. También lo hizo el Zaragoza del sí se puede de la temporada 2011-12 con los fichajes invernales de Apoño, Aranda, Dujmovic y Obradovic.

Poder, se puede. Estamos en la segunda parte de la temporada. Quedan muchos puntos por disputar y mucho trabajo por hacer. Con compromiso de la plantilla y cuerpo técnico, implicación de la propiedad, fichajes acertados (como creo que es el de Sadiq) y con un poquito de suerte, Valladolid, Valencia y Espanyol lo podrían conseguir. Su situación es muy grave, un descenso a Segunda afectaría a sus ingresos televisivos y seguramente provocaría una fuga de futbolistas hacia otros clubes. Por arriba, los tres de siempre esta temporada sí compiten por lo mismo, al menos hasta que aguante este Atlético con récord de socios y abonados. La vida le sonríe, no pretende hacer ninguna incorporación ahora, ya que Simeone tiene a casi todos los jugadores disponibles y la plantilla está compensada. Veremos qué pasa con Lemar.

El Madrid, con fichajes o sin ellos, tiene pinta de campeón. Eso sí, un poquito más de acierto en los penaltis no le vendría mal. Sabe de la necesidad de hacerse con un central (Laporte, Vitor Reis o Rafa Marín) y un lateral derecho (Alexander-Arnold). Por poco que le guste a Carragher, ex del Liverpool. La idea del club es la de no mover ficha en esta ventana. El último fichaje invernal fue el de Brahim Díaz en 2019 y porque era una oportunidad de mercado. Todo esto mientras espera la llegada de Zubimendi en verano. El Barcelona ha tenido cuatro meses para lograr el espacio salarial que necesitaba para inscribir a Dani Olmo y Pau Víctor. Ni Nike, ni la palanca VIP, ni nada…otra vez con el agua al cuello, in extremis, que estrés… pero esta vez no. Aunque eso no significa que enero vaya a ser un mes tranquilo. No creo que con las nuevas incorporaciones las cosas se muevan mucho por abajo o por arriba, pero algunos puntitos darán.

Es una ventana complicada porque intenta arreglar media temporada de algunos equipos “mala e indefendible”, como dijo en su momento Baraja. Un fichaje de invierno no es un amigo invisible o un paquete que recibes, a ver que sale. Se debe analizar muy bien lo que llega en todos los sentidos: adaptación, rendimiento, si es económicamente interesante, perspectiva de futuro… porque te juegas mucho. Si aciertas, conseguirás lo que quieres; si no, las consecuencias pueden ser devastadoras. Aunque los fichajes no lo son todo, lo vimos en el Valencia-Real Madrid porque como dice el Pontevedra #HaiqRoelo. ¡Feliz Año Nuevo!

Sigue el canal de Diario AS en WhatsApp, donde encontrarás todo el deporte en un solo espacio: la actualidad del día, la agenda con la última hora de los eventos deportivos más importantes, las imágenes más destacadas, la opinión de las mejores firmas de AS, reportajes, vídeos, y algo de humor de vez en cuando.