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¿A Foden nadie lo quiere?

Realidad. La Champions no engaña. La máxima elite es siempre aclaradora cuando llegan sus últimas rondas. Lo que durante todo el curso parece gris en realidad es negro; y lo que parece gris en realidad es blanco. Véase el PSG. O véanse algunos jugadores que irrumpen cuando otros menguan. Ocurre en el City, sin ir más lejos. Mientras Haaland sale esquilmado del Bernabéu cada vez que se bate en duelo con Rüdiger, el joven imberbe Foden hace estragos con sus golazos y sus toques geniales. Nada nuevo.

Diferencia. Es excelente el zurdo inglés y tiene personalidad. Y, lo mejor de todo, sobresale en los partidos grandes, aquellos en los que Haaland, por seguir con la comparación, viene dimitiendo con demasiada frecuencia. El noruego no le marcó al Madrid en ninguno de los dos partidos del curso anterior ni en el de este, tampoco en la final de Champions, ni ha logrado hacerlo en las últimas semanas ante sus rivales directos por el título en la Premier -Liverpool y Arsenal-. Es su asignatura pendiente. Su problema más grave. Debe corregirlo sí o sí.

Pep. Volvamos a Foden. De él no se habla lo suficiente, o desde luego bastante menos de lo que se debería. No hay noticias sobre quién quiere ficharle. No se sabe su precio. No llena titulares por su futuro o por sus pretendientes. Guardiola dijo con la boca llena que es el mejor jugador de la Premier y si lo dice Pep es inútil rebatirle. Es más, conlleva un riesgo posicionarse así. Un riesgo en el vestuario. Ese mismo en el que Haaland es una megaestrella y Foden parece entrar aún con cantimplora, gorra y mochila.

Maestro. Hoy o mañana, o si no a la semana siguiente, Xabi Alonso será campeón de la Bundesliga tras once años de reinado del Bayern. Desde su debut ante el Schalke cuando el equipo estaba en descenso veníamos avisando de sus cualidades. Pues bien: ni los más ‘Xabialonsistas’ del lugar podíamos imaginar algo así. Histórico es poco; milagroso, más bien.

Hoy descubrimos a… Víctor Guzmán (2002). Partidazo con Rayados ante Inter Miami en la Concachampions, central potente y con gran futuro en México y quizá en Europa. Se ‘comió’ a Luis Suárez a pesar del partido de brega que le propuso el uruguayo y tampoco Messi encontró forma de superarle. El Toro es mucho Toro. Apunten su nombre.

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