Carla Suárez ha sentido la llamada de la maternidad y no lo esconde. La canaria ha hablado con As sobre sus deseos de ser madre y una próxima retirada del circuito profesional.  “No sé si el año que viene será el último, o el 2021. Pero mucho más no voy a seguir jugando porque tengo el objetivo se ser madre y quiero serlo más pronto que tarde. Llegará sólo, pero una vez que lo sea, no volveré a jugar al tenis”

Repasamos el estilo de vida de esta deportista, amante de los gatos y de su tierra.

Tenis desde los 9 años

Carla se considera a sí misma una mujer de sueños. Comenzó a los 9 años en el mundo de la raqueta, quizá de modo inesperado, tal y como muchos otros niños, como una actividad extraescolar a la salida del colegio en Gran Canaria.

Al principio acudía una o dos veces por semana y poco a poco fue aumentando tanto la frecuencia como los cambios de club.

"Soñé que ganaba Roland Garros cuando tenía 12 ó 13 años”, confesaba la deportista, que poco a poco fue ganando calidad. Con 18 años se trasladó a Barcelona donde conoció a los entrenadores con los que continua hoy en día.

Mens sana in corpore sano

Suárez entrena una media de dos horas al día, fuera de la competición, actividad que combina con ejercicios en el gimnasio.

Tal y como vemos en su cuenta de Instagram, donde tiene más de 58.000 seguidores, su rutina es de lo más variada: pesas, abdominales, TRX… Excepto correr en la cinta (lo que ha confesado que menos le gusta) la vemos disfrutar con todo tipo de ejercicios.

En cuanto a la alimentación, Carla trabaja con una nutricionista desde hace varios años y tiene muy en cuenta todo lo que ingiere: “creo que la alimentación es una parte muy importante en lo que envuelve a un deportista”, admite.

Como buena canaria, su plato favorito son las papas arrugás con mojo, si bien su alimentación se basa en mucha fruta y verdura, intentando evitar alimentos con altos contenidos en grasa y azúcares. “Solemos hacer una dieta bastante completa que incluya de todo, pero muy controlado”.

Come cinco veces al día: desayuno, seguido de un almuerzo a media mañana, que puede incluir una barrita o una fruta. Después la comida, y por la tarde, una merienda con pan, jamón y queso, y alguna pieza de fruta. Finalmente por la noche, la cena.

Se considera una mujer sencilla, que le gusta vestir de forma cómoda y llevar ropa suelta, blusas o camisas sin mangas. “Cuando tengo la oportunidad de arreglarme me gusta plancharme el pelo, pintarme los ojos y utilizar algo de maquillaje básico”.

Siempre cerca del mar

Los básicos de la joven para desconectar son muy sencillos: ir a la playa, a la piscina, un buen libro o conducir con la música alta. “Me gusta leer. Voy por épocas, algunas veces muchos, otras menos, pero siempre llevo lectura. Me gusta leer antes de irme a dormir y luego, claro, en los vuelos. No tengo una temática favorita y varío mucho, desde novela policiaca a histórica o incluso libros de autoayuda”.

Carla siempre habla de su tierra y de sus planes allí: “cuando sea mayor, quiero comprar una casa en la playa para que lo primero que haga por la mañana sea irme al agua (…) Quiero comprármela en Canarias” comentaba en entrevista a El País.

La española, que ha dicho adiós a Wimbledon tras caer en octavos de final, ya vislumbra un vida fuera de las pistas pero seguro que todavía tiene muchas alegrías y tenis que ofrecer.