Javier Martín

El cielo le pertenece

Apenas puede esprintar, apenas puede driblar, pero cuando se eleva en el aire es para quedarse. Cristiano Ronaldo es alto, además salta mucho y además aguanta en el cielo mientras las torres galesas se hacen pequenitas. Cristiano dio un recital de cómo jugar por arriba, sus compañeros de cómo jugar por abajo. De los galeses no hubo noticias mas que en alguna pifia de Alves, cuando salía de su casilla del 5.

A las armas, a las armas”, cantábamos el himno portugués en las gradas de Lyon, pero no hacían falta las armas. El equipo de Santos ayer sacó la batuta y demostró, para quien tenía aún dudas, que saben moverla como el que más. Portugal parecía Brasil del 70 por su suficiencia y variedad de recursos. Sólo faltó Pepe a la fiesta, y es mucho Pepe comparado con Alves, pero ayer era lo mismo. Por fin Joao Mario sacó sus esencias y Adrien, también. Demasiado equipo para los galeses, sobre todo si hay alguien que juega en el cielo.