La hora del Atlético

Partidazo. No es el mejor Milán de la historia, pero siempre es un conjunto poderoso y con grandes jugadores. El Atlético de los guerreros del Cholo le pasó por encima. Poco a poco, con paciencia, luchando cada balón como si fuera el último. Lo pasó mal unos minutos en el primer tiempo, pero poco más. Europa le debe una Champions al Atleti y ha llegado la hora de cobrarse esa deuda histórica. El propio Simeone se quedó con las ganas de hacerse con este trofeo en su etapa de jugador y siempre recordará la maldita noche ante el Ajax. Hoy el fútbol europeo hablará de Costa, de Raúl García, de Gabi, de Courtois... Del ATLÉTICO DE MADRID, con mayúsculas. Hay equipo, afición, ganas y fe, mucha fe. Es nuestra hora.

Llenazo. Vivir un partido de este calibre en el Calderón debería ser casi obligatorio para el buen aficionado al fútbol. Ayer hubo un ambiente extraordinario, con la gente deseosa y más entusiasta que nunca con los suyos. Los seguidores italianos no pararon de hacerse fotografías con las banderas rojas y blancas como fondo. Fue una explosión de júbilo, de alegría, de ayudar a este equipo que lo da todo. Eso es la grada del Manzanares, que acabó haciendo la ola, que coreó los nombres de Arda, Courtois, del Cholo... Nada de óperas ni de exquisiteces. Y pese a la hora y que hoy hay colegio, también se vieron niños. ¡Qué grande es ver un encuentro de este calibre en nuestro estadio! Es algo inigualable.

El bombo. Estamos entre los ocho mejores de Europa y pocos querrán tener al Atleti como rival. Mejor no medirse a los más fuertes pero llegados a este punto, da igual. El Atleti ha recuperado a sus lesionados, los que entran se sienten importantes y el grupo se ve fuerte. Los habladores y vaticinadores ayer se acostaron sabiendo que el equipo no cede. Tampoco en Europa. Estamos a cuatro encuentros de Lisboa, pero vayamos partido a partido, minuto a minuto. En silencio.

Raúl García. El navarro jugó anoche un gran partido, peleando, ayudando, corriendo, dejándose el alma en cada jugada y marcando un gol. Raúl García alcanzó a Luis Aragonés como el futbolista rojiblanco con más encuentros en la primera competición de clubes (21 encuentros y cinco goles). Luis fue el santo y seña de nuestra entidad y por eso siempre se le recuerda en el estadio. Y Raúl ya se ha convertido en alguien importante para técnico, jugadores y aficionados. Y ha sido a base de trabajo, trabajo y trabajo. Es un ejemplo para todos y el mes próximo hará definitivamente historia en el Atlético.

La Liga. El sábado espera otra fiesta en el Calderón, con tres puntos vitales para seguir dando guerra a los dos todopoderosos. Al final del encuentro de Vigo, los jugadores fueron claros: quedan once finales y quieren ganarlas todas. Es el carácter ganador que le ha dado el Cholo al equipo: ganar siempre, a la galaxia, al Milán o a quien sea. Es el tiempo del Atleti.