Bree Olson trabajó durante 7 años como actriz porno. Ahora, con tan solo 26 y un año después de dejarlo, ha querido lanzar un consejo muy claro y entre lágrimas a todas las chicas que estén pensando en meterse en ese mundillo: "Tengo un mensaje muy importante para vosotras: No lo hagáis".

A través de un vídeo de Youtube de la publicación Real Women Real Stories, explica que cada vez que sale de casa siente que lleva la palabra "puta" escrita en la frente, por lo que a veces se aísla: "Hay días que no quiero salir de casa porque no me siento con fuerzas de encarar ese mundo que se ha creado a mi alrededor".

Olson, que durante su etapa en activo llegó a ganar 60.000 dólares al mes, también confiesa cómo le ha afectado su trayectoria profesionalmente: "La gente me mira como si fuera inferior y me he dado cuenta de que es imposible volver atrás en el tiempo para intentar ser, por ejemplo, enfermera, profesora o trabajar para alguna empresa".

Impedimento profesional y personal

El drama que relata no solo se ciñe a su experiencia profesional, sino también a su vida personal: "Cuando conozco a alguien, después de saber quién soy dejan de querer ser amigos míos".

Por todo ello, lamenta que "me he convertido en una marginada que no tiene un grupo de activistas que le ayude", porque hay gente que la trata como si fuese "una pedófila" que va a abusar de sus hijos. "El dinero no merece la pena para lo que te hace sentir la sociedad el resto de tu vida", concluye.

En la actualidad, Olson intenta abrirse un hueco como actriz en el cine convencional. En el porno podría ganar 20.000 dólares semanales, pero como explica, no quiere volver a relacionarse con ese mundo.

Proyecto Real Women Real Stories

La actriz hace esta denuncia a través del proyecto Real Women Real Stories. Se trata de una iniciativa originada por hombres que pretende dar "voz a las mujeres que sufren" desórdenes de alimentación, abusos sexuales o discriminaciones por género.