El lenguaje homofóbico está tan profundamente arraigado en la lengua vernácula del fútbol que parece casi inocuo, pero desde luego no lo es.

PorLucía Taboada

Es fundamental el ejemplo de Hitzlsperger o Jankto. El mundo del fútbol es suyo, aquí solo sobran los homófobos...

PorGalder Reguera

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