Pol Espargaró vuelve a subirse a una moto tras su grave caída
El piloto catalán quiere dejar atrás la lesión y ya se centra en su vuelta a los circuitos, que previsiblemente será en Silverstone.
Pol Espargaró regresaba a KTM (en el equipo GasGas) tras dos años en Honda, y lo hacía con ilusiones renovadas. Sin embargo, una grave caída en los entrenamientos libres del Gran Premio de Portimao provocó que el catalán sufriese ocho fracturas. Una larga recuperación que ha hecho que hasta la fecha no haya podido disputar ninguna carrera con sus nuevos colores.
Meses duros, donde el piloto ha sufrido más que nunca. “Tenía como ocho fracturas en total, algunas de ellas eran muy serias. Al principio tenía problemas con la boca, estuvo completamente bloqueada durante cuatro semanas. No podía comer, perdí mucho peso. He llorado mucho. De dolor y de pena, ha sido muy difícil manejar la situación. Han sido los tres meses más duros de mi vida”, explica Pol en una entrevista a MotoGP.com.
Una recuperación que ha sido lenta y también marcada por el dolor y el sufrimiento. “Tuve problemas en los nervios del cuello, no podía dormir mucho durante la noche. Y cuando me quitaron todo de la boca, pude empezar a hablar, comer y ganar músculo. Pronto estaba entrenando, y el dolor volvía”, comenta el catalán. Aunque es plenamente consciente de que esta situación puede suceder en cualquier momento. “Es lo que pasa, está en el contrato cuando estás en MotoGP. Cuando eres rápido todo es muy bonito, pero puede cambiar en sólo un segundo”.
Más de tres meses trabajando en la oscuridad, pero parece que Pol ya ve la luz al final del túnel. Y es que el catalán se ha vuelto a subir a su RC16 en el Festival de Goodwood. El piloto de GasGas se ha mostrado muy contento tras su reaparición. “Se me ha hecho muy corto, pero es muy agradable pilotar la moto. Es estupendo ponerse al día con los aficionados después de estos meses en casa, recuperándome de la lesión de Portimao, ¡pero ya quiero volver a la normalidad!”, ha comentado.
Su vuelta a los circuitos, más cerca
La vuelta a los circuitos podría producirse tras el parón de vacaciones, en Silverstone. Para ello lleva trabajando varias semanas. “Se acabó hablar de la lesión, entiendo que la gente quiera saber cuándo volveré, pero tengo muchas ganas de reaparecer, de recuperar la normalidad, de empezar a trabajar con el equipo, de recuperar la velocidad y de luchar con los chicos. Lo estoy deseando”, afirma Pol.
Respecto a las sensaciones que le ha dejado su nuevo equipo durante este tramo de la temporada, el catalán se muestra optimista. En unas declaraciones recogidas por Motorsport, Pol asegura que la evolución de la moto ha sido positiva. “A principios de año, en Austin o Argentina, no me preocupaba perderme carreras porque no iban muy bien. Me decía a mí mismo, no estoy tan mal en casa, pero entonces llegó Jerez y... ¡fue doloroso! Me resultaba difícil ver las carreras por televisión. Jack empezó a ir rápido, y yo estaba a su nivel en pretemporada”.
Su futuro no le preocupa
KTM tiene por delante un abanico de posibilidades para la siguiente temporada, pero solo cuenta con cuatro asientos para cinco pilotos. Binder y Miller parece que tienen un hueco asegurado. Pedro Acosta irrumpe con fuerza desde Moto2. Y Augusto Fernández está consiguiendo buenos números en su temporada de rookie. Pero a Pol no le preocupa. “Es su problema, no el mío. Tengo dos años de contrato. Me lesioné y no pensé en ello. Sólo quiero volver, conseguir resultados y demostrarles que tengo que quedarme”, afirma convencido.
También ha dejado una frase contundente acerca de su asiento y los jóvenes que aprietan con fuerza. “Si no consigo suficientes resultados para merecer quedarme, estaré encantado de dejar paso a los jóvenes”. Aunque se muestra confiado en sus posibilidades y el rendimiento que ofrecerá en su vuelta a las pistas. “Tengo la intención de demostrar que todavía tengo mucha velocidad”.