Márquez pone el broche final

A lo largo de la temporada, Marc Márquez ha sido protagonista en numerosas ocasiones. Sus 25 victorias en MotoGP (14 al esprint y once en carrera), el dominio impuesto junto a Ducati y su pelea por la corona de la categoría reina frente a su hermano Álex, fueron algunos de los motivos que pusieron al español en el foco a lo largo del curso. Pero nada llamó la atención tanto como su regreso a la cima del mundo 2.184 días después de la última vez. “Volver a ganar era algo que en alguna ocasión veía muy lejando, casi imposible”, confesaba el español, que se convirtió en la gran estrella de una Gala FIM en la que se presentó un nuevo galardón por y para el ilerdense.

Lausana (Suiza) reunió a todos los campeones que conquistaron sus categorías en la última temporada bajo el paraguas de la federación. Y de nuevo España volvió a ser protagonista con un total de ocho galardonados, que le convertían de nuevo en el país que más campeones aportó durante la ceremonia. Porque en una lista encabezada por Marc Márquez (MotoGP), también se celebraron las coronas de José Antonio Rueda (Moto3), Josep García (EnduroGP y E1), Berta Abellán (Trial Femenino), María Herrera (WCR), Brian Uriarte (JuniorGP), Beñat Fernández (Supersport300) y un Toni Bou (TrialGP, X-Trial y Trial de las Naciones), que buscará las 40 coronas el próximo año: “Lo que he conseguido es un sueño y estoy dispuesto a luchar por más”.

De nuevo la noche se convirtió en una fiesta española donde Herrera, jamás “hubiese imaginado estar compartiendo velada con Marc Márquez o Toni Bou”. Sin embargo, llegó el momento de celebrar su corona junto a dos leyendas nacionales pero también, internacionales. Ya que además, en el escenario se conmemoraron entre muchos otros los títulos de Toprak Razgatlioglu (SBK), Diogo Moreira (Moto2), Romain Febvre (MXGP), Stefano Manzi (SSP) o Daniel Sanders (Raids). Aunque también hubo tiempo de premiar una despedida que no se podía pasar por alto: la de Jonathan Rea. El hexacampeón de Superbikes se perdió una boda para ser nombrado leyenda del motociclismo, fue homenajeado y en su último adiós, se encargó de entregar a varios galardonados esa medalla de oro que tantas ocasiones lució en su cuello.

Ovación final para Márquez

La despedida del norirlandés ha coincidido en el tiempo con la de Toprak, aunque ambas llegan de modo diferente. Mientras que Rea colgará el casco, el turco va “a cumplir mi sueño” en MotoGP; donde compartirá parrilla con un Marc Márquez que se llevó el gran aplauso de la noche, antes de recibir la ovación final. Después de asistir a la inauguración oficial del Racing Motorcycle Museum (ubicado en Mies (Suiza), antigua sede de la FIM), el español se vistió de largo para volver a estar presente en una gala en la que se ausentó durante cinco temporadas. “Pero estoy súper feliz de haber vuelto, porque quiere decir que la temporada ha sido súper buena”, celebraba el piloto de Ducati, antes de recibir la sorpresa final.

Jorge Viegas, presidente de la FIM, presentó un nuevo galardón que “solo lo vamos a otorgar a deportistas verdaderamente excepcionales que han logrado hitos excepcionales”. Y Marc fue “el primero (de la historia) en tener este trofeo por tu actuación y tu retorno, que es de lo más inspirador”. Bautizado como el Trofeo Deportivo de la FIM, una vez el campeón de MotoGP lo tuvo entre sus manos todos los asistentes se pusieron en pie, para ovacionar al nueve veces campeón. La emoción invadió el recinto y sobre todo un escenario, donde el gran protagonista de la noche recibió al resto de campeones para una foto de familia que cerró este 2025 que ya es historia.

¡Tus opiniones importan! Comenta en los artículos y suscríbete gratis a nuestra newsletter y a las alertas informativas en la App o el canal de WhatsApp. ¿Buscas licenciar contenido? Haz clic aquí