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MOTO3 | DAVID ALONSO

“Márquez me dice que se puede”

Marc felicitó al ganador de Moto3 en el ‘pit-lane’ del circuito de Chang y le animó en clave de título, ahora que está a 25 puntos del liderato de Masiá.

BURIRAM
David Alonso luciendo el trofeo de su cuarta victoria en Moto3.
Mela Chércoles

Con sólo 17 años, y en su temporada de debut en el Mundial, David Alonso ya suma cuatro victorias en Moto3 para alegría propia y del GasGas Aspar Team. El colombiano de Madrid tiene tirón dentro y fuera de la pista, como quedó demostrado con la felicitación en el pit-lane que le dio el mismísimo Marc Márquez, tras ganar la carrera en el circuito de Chang, al tiempo que le animó que fuera a por el título

―¿Cómo lo hace? ¿Cómo consigue ganar carreras en plan guerrero sin importar que esté en su primer año y con la experiencia de un veterano?

―De pequeño me llamaban ‘el hombre de hielo’, algo que perdí un poco el año pasado, pero éste estoy recuperando eso otra vez. Me gusta pensar mucho encima de la moto y en las carreras de grupo me tiro pensando toda la carrera cómo voy a ganar la última vuelta.

―Cuente esa última vuelta de Buriram. Pasó de tercero a primero con facilidad para luego cerrar la puerta y estar ajeno a todo lo que pasó a su espalda.

―Iba toda la carrera entendiendo el rebufo, viendo cómo funcionaba el viento y qué pasaba si hacía una cosa u otra, para luego colocarme bien. Tenía claro la posición en la que quería ir y quería liderar en las últimas curvas, porque la frenada era mi punto fuerte y sabía que era difícil que me pasaran en la última curva.

―Fue la cuarta victoria del año y, como en Silverstone, en un circuito que no conocía. ¿Cómo se hace a él tan rápido?

―Hemos hecho un buen trabajo y hemos rodado mucho en solitario, y eso ayuda luego bastante en carrera. Hay que hacerlo aunque sea un circuito nuevo, como si lo conociera.

―Antes de que empezara la carrera, me crucé con Nico Terol en el ‘paddock’ y me advirtió que iba a hacer un carrerón. ¿Cómo lo tenían tan claro?

(Sonríe). Yo en mi interior lo tenía claro, pero nunca se sabe lo que va a pasar. Hay que salir siempre confiado.

―¿Le vale con ser el mejor novato del año o va a ir también a por el título?

―La verdad es que no me esperaba que a estas alturas pudiéramos discutir sobre esto. Ya simplemente ese hecho me hace feliz. Y ser el ‘rookie’ del año es algo que me emociona también, porque es bonito de conseguir en tu primer año y bonito para el equipo, porque es otro título diferente. Me quedo con eso de aquí.

―¿Qué le pareció que un tal Marc Márquez saliera al ‘pit-lane’ para felicitarle en su viaje al ‘parque cerrado’?

(Se le ilumina la cara con una amplia sonrisa). Eso me ha hecho muy feliz cuando le he visto. He clavado los frenos enseguida, para darle un abrazo. De vez en cuando, cuando tengo la posibilidad hablo con él y la verdad es que trato de escuchar y de prestar atención a todo lo que dice, porque es un ocho veces campeón del mundo.

―¿Qué le dijo en ese abrazo en el ‘pit-lane’?

―Me dio la enhorabuena y me dijo: “Vamos, que se puede”.

―¿En clave de título?

―No sé. Puede ser. Puede ser... (Se ríe).

―De todos los consejos que le ha dado Márquez desde que habla con él, ¿cuál ha sido el más valioso?

―Me gusta, por ejemplo, que cuando logré mi primera victoria había muchas felicitaciones y él me dijo: “Sigue insistiendo que es momento de seguir apretando”. Eso me marcó mucho.

―Tengo entendido que se ha ganado un teléfono móvil nuevo pata negra con la victoria de Tailandia...

(Sonríe). El viernes por la tarde surgió el plan, porque yo tengo un móvil muy viejo y bastante roto y me dicen que lo cambie, pero a mí eso me da igual y sigo con él. Nico (Terol) se calentó y me dijo que si ganaba la carrera me pagaba él la mitad de un móvil último modelo. Le dije que trato hecho y eso es lo que me ha motivado. (Risas).

―¿Sabe ya cuál quiere?

―Yo soy de iPhone, pero voy por el 6 y no sé cuál hay ahora. Me cogeré el más moderno que haya porque ya no lo renovaré hasta el 2030 o por ahí. Voy a ver si le saco el teléfono entero en vez de sólo la mitad. (Más risas).