Maverick arranca delante con 0.188 sobre Quartararo
La mejor Ducati fue esta vez la de Morbidelli, tercero por delante de un Acosta que se fue al suelo cuando venía en casco rojo. Martín 5º, Marc 6º y Pecco 9º.
Motos a pista para olvidarse por unos instantes del mercado de MotoGP y ver lo que los protagonistas de la parrilla son capaces de hacer en el extraordinario circuito de Mugello. Y en el arranque, Maverick Viñales al frente de una tabla de tiempos que aún está por encima del segundo del récord de la pista.
El 1:46.140 del piloto de Aprilia le ha dado una ventaja de 0.188 sobre Fabio Quartararo, que ha sido el primero de sus perseguidores, y está a 1.285 del récord del trazado transalpino, en poder hasta este fin de semana de Francesco Bagnaia con 1:44.855. Tras ellos dos y hasta cerrar las diez primeras plazas, Morbidelli, que ha sido sorprendentemente la primera de las Ducati, Acosta, Martín, Márquez, Aleix, Rins, Bagnaia y Álex Márquez.
Sorprende positivamente ver a los dos pilotos de Yamaha entre los diez primeros de inicio, con Fabio segundo y Rins octavo, a pesar de sufrir una caída en la curva 1. Esto ha de suponer una inyección de moral para una fábrica que de momento está aprovechando las concesiones para evlolucionar su moto mejor que Honda. Los del ala dorada han vuelto a instalarse en el vagón de cola: Zarco 23º, Mir22º, Nakagami 21º y Marini 19º.
También es reseñable el cuarto puesto de Acosta, de nuevo en un circuito en el que nunca había rodado con la MotoGP y a pesar de sufrir una caída a poco más de dos minutos del final. Sucedió en la curva 10 cuando venía en casco rojo y rebajando por 11 milésimas el mejor crono que figuraba en ese momento. Habrá quien empiece a decir que se está cayendo más de la cuenta, pero nada preocupante por tratarse de un novato que no para de aprender, y en este deporte se aprende a base de caídas.
Respecto al resto de españoles, Raúl Fernández 11º, Pol 15º, Augusto Fernández 20º y Mir 22º. Especialmente meritorio es el resultado de Pol, a 0.993 de la cabeza y a sólo 17 milésimas de Binder y a una décima de Miller, los oficiales de KTM. Todo en un circuito en el que no rueda desde hace dos años y tras haberse retirado la temporada pasada. No está nada mal para un jubilado.