Luces y sombras con medio Mundial por delante
Un gran Red Bull, un Ferrari tan rápido como frágil, la progresión de Mercedes y el estancamiento de McLaren han definido las primeras once carreras de 2022
Once carreras de veintidós, ecuador de la temporada en la Fórmula 1. Se ha regresado a Australia, Miami se estrenó con nota como evento multitudinario y los circuitos europeos cuelgan el no hay billetes cada fin de semana. El Mundial crece, las cifras de audiencia internacionales así lo reflejan. Y mientras, este ha sido el desempeño de las diez escuderías en los primeros cinco meses de campaña.
Red Bull: velocidad crucero. Verstappen lidera el campeonato con 38 puntos sobre Leclerc, ha ganado seis grandes premios, subió al podio en Mónaco y Austria y tuvo problemas mecánicos en los otros tres. Es el más regular y también el más rápido. Líder inalcanzable por ahora. A su lado, Pérez logró un triunfo histórico para México en Mónaco y extendió su contrato hasta 2024. En el campeonato de constructores, la superioridad es aún mayor.
Ferrari: luces y sombras. Si se tiene en cuenta dónde estaban en 2020 y 2021, el trabajo de Maranello es sensacional. Pero si se valoran las expectativas generadas en marzo, con quizás el mejor coche de la parrilla, hasta ahora se han quedado a medio camino. Leclerc es segundo en el campeonato y Sainz es cuarto, a 37 puntos de su compañero, pero se han escapado demasiadas victorias casi seguras para el monegasco y no se queda atrás el madrileño con cuatro ceros, dos de ellos por causa mecánica. Los triunfos en Silverstone y Spielberg reviven las esperanzas de la Scuderia. Es un tópico, pero queda medio Mundial.
Mercedes: en clara progresión. Su situación es opuesta a Ferrari, es un mal año en comparación con los siete anteriores, pero se reponen de un inicio de temporada horrible con un monoplaza que no terminan de explotar. Suman siete podios, Hamilton ha sido tercero en las últimas tres carreras. Sorprende ver al siete veces campeón detrás del joven Russell en la clasificación. Si Sir Lewis no es capaz de ganar un gran premio en 2022, cortaría una racha histórica desde 2007.
McLaren: la mayor decepción. Las escuderías medianas apuntaban a este cambio de reglas para dar un salto de prestaciones y recortar la desventaja con los grandes. Ferrari, que no es mediana, lo ha hecho. McLaren, sin embargo, se ha quedado a medio camino y el MCL36 es un claro paso atrás en comparación con sus predecesores. Norris hizo un podio de gran valor en Ímola. Ricciardo, sin embargo, está instalado fuera del top-10 más tiempo del que debería.
Alpine: hay coche, faltan detalles. Sin la sucesión de averías y problemas que ha tenido Alonso, y en alguna ocasión también Ocon, este sería el cuarto coche de la parrilla con clara superioridad. Además, el paquete de mejoras de Silverstone ha surtido efecto y se han asentado en la Q3 con cierto margen sobre los teóricos rivales directos. Pueden aspirar a algún podio a lo largo de la temporada y sería un premio merecido.
Alfa Romeo: una gran sorpresa. Es el coche más ligero de la parrilla y como tal se defiende en las rectas. Bottas aún es noveno del campeonato, aunque su gran inicio de 2022 se empieza a desdibujar; y Zhou es una de las revelaciones porque a una vuelta acostumbra a ser rápido cuando se esperaba poco de él, quizás porque parecía un simple piloto de pago. No lo es. Sexto coche por méritos propios.
Haas: habitual de los puntos. Tardó en llegar el primer punto de Mick Schumacher pero ya suma doce, se entona el hijo del Kaiser. Parece un clásico de su carrera deportiva: necesita un año y medio para empezar a destacar sobre el monoplaza, ya le pasó en F3 y F2. En cualquier caso, Magnussen ha sido muy superior hasta ahora y eso que a finales de febrero no tenía previsto subirse a un F1 nunca más. La salida de Mazepin les vino bien a todos.
Alpha Tauri: un paso atrás. Los primos de Red Bull eran muy combativos no hace tanto, tanto a una vuelta como en carrera, pero en 2022 se han alejado del top-10. Gasly sigue atado al filial al menos hasta 2023, aunque no haya sitio en el primer equipo, y Tsunoda puede seguir porque nadie aprieta por detrás en el programa de jóvenes.
Aston Martin: no despega. El ambicioso proyecto de Lawrence Stroll no tiene resultados brillantes, aunque puntúen en la mitad de las carreras. 15 puntos de Vettel y tres de Lance Stroll no están a la altura de las expectativas alrededor de un fabricante de automóviles emblemático.
Williams: farolillo rojo. El coche que más se parecía a Mercedes, sin pontones, empieza a asemejarse cada vez más a Red Bull o Ferrari, y eso quiere decir que el concepto de diseño no fue una buena idea. A Albon le sirve porque le ha permitido regresar al Gran Circo. Pero Latifi parece cada vez más fuera que dentro del campeonato.