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MOTOGP | ITALIA

Honda ningunea a Rins

A pesar de tener contrato con la fábrica y de ser el único del ala dorada que ha ganado una carrera este año, aún no dispone del chasis Kalex con el que cuentan Márquez y Mir.

MUGELLO
Álex Rins con Lucio Cecchinello.
MIRCO LAZZARI GPAFP

Quizá sirva para entender mejor la difícil situación que atraviesa Honda desde hace tiempo a nivel técnico el esperpento que está experimentando Álex Rins como piloto del ala dorada... A pesar de ser su único piloto capaz de ganar hasta la fecha una carrera esta temporada, y con contrato directo con HRC, no con su equipo, el LCR Honda Castrol, el catalán tampoco dispondrá en el GP de Italia del nuevo chasis Kalex con el que cuentan desde Jerez los oficiales del Repsol Honda, Marc Márquez y Joan Mir. Un ninguneo en toda regla hacia el ex piloto de Suzuki, fábrica con la que ganó dos de las tres últimas carreras del año pasado.

Ya con Honda ha ganado este curso en Austin, algo que debería ayudarle a tener más peso en su actual fábrica, pero ni siquiera sabe cuándo podrá montar ese chasis Kalex en su RC213V que ha recibido las bendiciones de Márquez y Mir. “Lo que puedo decir es que tenemos la moto que tenemos y que tenemos que dar el máximo con esta configuración. Tenéis que preguntar a Honda si me van a dar o no me van a dar el chasis Kalex”, empezó diciendo en la sala de prensa de Mugello para luego explayarse más: “Tuvimos una reunión con Lucio (Cecchinello) y Alberto (Puig) en Le Mans para ver cuándo lo traerían, cuándo me lo darían a probar, cuáles eran las intenciones de Honda. Y Alberto en un principio me dijo que quizás el sábado, después me dijo que no tendría la posibilidad de probarlo allí, y que ya llegaría. Hoy cuando he llegado le he preguntado a mi equipo: “¿Tenemos chasis Kalex para probar?”. Y me han dicho: “No, no, aquí no estará”. Entonces, ahí se ha acabado la cosa. Seguir insistiendo, seguir preguntando… Es simple: o es sí o es no. ¿Es no? Pues a intentar dar el máximo con lo que tengo, buscar un buen compromiso para este circuito, que no es fácil, y veremos qué somos capaces de hacer”.

Su discurso resignado podría confundirse con conformismo, pero no es así: “Desde luego que sí que lo quiero, pero al final no es un tema de enfadarse o no. En estos dos últimos grandes premios, cuatro y cinco semanas atrás, el estrés que viví yo a nivel mental y físico fue muy grande. Al final estás luchando, ves que tienes potencial, que puedes dar mucho más en pista, pero te ves limitado porque ves que no mejoras, que vas lento. Fue duro, pero al final es lo que tenemos. No nos podemos centrar y focalizar en un simple hecho. Lo vuelvo a decir, Mugello es una pista que me gusta, es una pista rápida, con curvas de mucho gas. Así que veremos”.

Al hablar de estrés, se le pregunta a Rins si trabaja con psicólogo, y responde así: “Hace años, desde 2017. No es que cuando tienes un problema te llama y lo solucionas. Al final es una persona más de mi equipo personal, y estoy en constante contacto con esta persona y la verdad es que me ayuda. Lo ha hecho en muchos momentos de mi carrera. No me imagino no tenerla, es como dejar a mi entrenador. Es una pieza clave. Y ahora me siento bien, estoy preparado. Cuando tienes mucho estrés, en cada persona se manifiesta de una manera u otra. Es estrés general, de querer ir más rápido y no poder, de la situación”.

Y por rematar de nuevo con el asunto del chasis Kalex, asegura que se fue de Le Mans con la esperanza de encontrárselo en su box al llegar a Mugello: “Sí que es cierto que después de Francia en mi cabeza estaba el hecho de que había tres semanas por delante, y que creía que llegarían a Mugello. Pero he llegado aquí y no me han dado la posibilidad. Tampoco he hablado con Honda, ni con Lucio. He tenido un meeting con mi técnico y ya está. Me ha dicho que no y no le voy a dar más vueltas. En principio me ha dicho que no hasta nuevo aviso. ‘Estás castigado hasta nuevo aviso’. No, es broma. En principio se quieren centrar en que haga estas tres carreras con la moto que tengo. Es lo que me ha dicho”.