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FÓRMULA 1

Norris incendia el Mundial

El inglés está a 70 puntos de Verstappen con 250 en juego. La superioridad de McLaren abre la puerta a la lucha por el título. “Todos flaquean”, opina Sainz.

Zandvoort
Winner McLaren's British driver Lando Norris (L) is congratulated by Red Bull Racing's Dutch driver Max Verstappen at the end of the Formula One Dutch Grand Prix at The Circuit Zandvoort, western Netherlands, on August 25, 2024. (Photo by JOHN THYS / AFP)
JOHN THYSAFP

¿Hay Mundial? Verstappen sale de Zandvoort con 70 puntos de ventaja sobre Norris después de que el inglés ganara el GP de Países Bajos y además se llevara el punto extra de la vuelta rápida. Quedan 250 puntos en juego repartidos entre nueve grandes premios y dos esprint. Tirando de matemáticas, al campeón le basta con ser segundo en todas las carreras para sentenciar su cuarto Mundial, y echando mano de la memoria a corto plazo, Lando no ha sido ni un dominador ni fiable desde que su McLaren es la referencia de la parrilla. Pero su gran fin de semana en Holanda, con 22 segundos de ventaja sobre Max bajo la bandera a cuadros, abre la puerta a los optimistas. Por delante vienen circuitos muy variados y pistas específicas como Monza, Bakú o Singapur en las que sobrevuela una amenaza: si hubiera problemas de fiabilidad en el Red Bull, el colchón del neerlandés desaparecía de un plumazo.

Helmut Marko, hombre fuerte de la bebida energética en la F1, concedió que la situación es “alarmante” para quienes dominan la F1 desde 2021. Verstappen asiente: “Es un mal fin de semana en general. Tenemos que entender por qué, pero las últimas carrera ya no habían sido fantásticas. Así que de alguna forma eso ya era alarmante. No tenemos que entrar en pánico, tenemos que mejorar la situación y en eso trabajamos, pero la F1 es muy complicada”.

“No necesito que me pregunten cada domingo si se puede luchar por el Mundial”

Norris logró su segundo triunfo en la F1 con tanto margen que parece entrar de lleno en la pelea por el título. Es cierto que McLaren sí aspira a ganar el campeonato de constructores (están a 30 puntos de Red Bull). Lando, además, sigue siendo autocrítico. Es consciente de que en Canadá, Barcelona o Austria pudo ganar. Y también en Hungría, a su compañero. Puede que eche de menos los siete puntos que la escudería de Woking perdonó en Budapest. “Hemos luchado por el campeonato desde la primera carrera del año, no es una cosa que venga de ahora, por eso lo tengo que hacer mejor. Sigo a 70 puntos de Max así que iremos de carrera en carrera porque no tiene mucho sentido pensar en nada más. No necesito que me pregunten cada fin de semana si se puede luchar por el campeonato”.

El inglés de 24 años, por los 26 de Max, concede que su MCL38 es ahora la referencia: “Al cien por cien, en Holanda he tenido el mejor coche. No ha sido dominante en ningún momento de la temporada, ni siquiera en Hungría, allí Max también era bastante rápido sin tener una gran carrera. Tenemos más información que la gente de fuera y podemos comentar con hechos en comparación con lo que la gente ve por televisión. Hemos tenido, de media, el mejor coche. Deberíamos haber ganado dos o tres carreras más y es así porque no hicimos un buen trabajo. Hemos tenido un gran coche desde que llevamos evoluciones a Miami, funcionaron muy bien entonces y ahora. Pero hay que seguir trabajando, Monza será un circuito diferente”.

“Todos los pilotos y equipos flaquean por algún lado”

¿Y cómo se ve esto desde otros prismas de la parrilla? Carlos Sainz, por ejemplo, recuerda que hasta los más grandes fallan cuando les ponen bajo presión: “Si Max sigue haciendo segundos puestos o terceros, le vale. Porque en algún momento Lando y McLaren fallarán. Pero si Max empieza a fallar, se le puede complicar. Ya se ha demostrado muchas veces que en cuanto alguien se pone bajo presión, todos empiezan a fallar. Verstappen parecía imbatible hace un año pero ahora que ha llegado McLaren, ya no son imbatibles. Hay que estar ahí, todos nos ponemos bajo presión y todos los pilotos y equipos flaquean por algún lado. Por eso hay que aguantar”.

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