“¡Estoy intentando no morir!”
El británico, que corrió por Magnussen en Haas, se mostró desesperado por la radio cuando más golpeaba la lluvia en Brasil: “No puedo ni ver el volante”.
No se vivieron condiciones nada fáciles bajo la lluvia durante la carrera de Interlagos y, en los peores momentos, se trató de una cuestión de supervivencia sobre el asfalto. Lance Stroll se quedó en la grava en la vuelta de formación, Nico Hulkenberg fue descalificado por recibir ayuda de los comisarios al salirse de la pista, Franco Colapinto se estrelló detrás del Safety Car, Carlos Sainz tuvo su segundo golpe del día… Fue un domingo duro para todos, en especial para un piloto que no esperaba ni correr el GP de Brasil: Oliver Bearman.
El británico se subió al Haas que será su coche en 2025 en sustitución de un Kevin Magnussen que estuvo enfermo ya desde el viernes y en la peor parte de la carrera, antes de que el coche de seguridad saliera a la pista por el aguacero, mostró su preocupación por la radio. “¿Cómo se nos permite competir así? Alguien va a chocar y va a ser un accidente muy grave. Ni siquiera puedo ver mi volante”, decía Bearman según recoge RaceFans, e insistía a su ingeniero de pista, Mark Slade: “Vamos, habla con la FIA, esto es muy peligroso. ¡Estoy intentando no morir!”.
“Gracias a Dios. Estaba muy mal”, se mostró finalmente aliviado cuando Dirección de Carrera neutralizó la prueba ante una situación demasiado peligrosa. Antes, el piloto de Haas había tenido momentos comprometidos, en especial en una salida de pista en la que tocó uno de los muros de Interlagos cuando perseguía a Sainz de una forma quizá demasiado agresiva. “Fue una carrera difícil. Demasiados errores por mi parte y eso realmente comprometió nuestra carrera”, reconocía una vez acabó la acción en Sao Paulo.
Con todo, Bearman al menos pudo ver la meta, al contrario que su compañero alemán, en la 12ª posición y se queda con el aprendizaje de cara a lo que viene el próximo año: “Por un lado, acabé bastante cerca de los puntos a pesar de la cantidad de errores que cometí. Pero por otro, tuve demasiados fallos, pérdidas de tiempo y cosas así. Fue un día realmente duro. Aprendí mucho, eso seguro. Correr en estas condiciones bajo el agua, es bastante raro que puedas hacer eso. Cada vuelta en mojado es muy valiosa y conseguí hacer muchas, así que estoy muy contento por eso”.
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