Alonso tiene un plan
El asturiano dice en un acto promocional en India que su objetivo es volver a ser campeón del mundo de F1. Y después, el Rally Dakar.
No va a ser esta temporada, ni quizá la siguiente. Pero Fernando Alonso tiene un plan: “En los próximos dos o tres años quiero ganar el tercer título mundial”. Pone la mira el asturiano en el plazo porque en la F1 en 2026 hay cambio de reglamentación que en Aston Martin afrontarán con la llegada de Adrian Newey, el ingeniero estrella de la F1 y con extenso palmarés detrás de los coches que han salido de sus diseños. Y en la escudería de Silverstone hay optimismo. “Fue una explosión de aplausos”, dice Lawrence Stroll, el propietario de Aston Martin, describiendo el momento en la fábrica cuando se anunció oficialmente el fichaje de Newey.
Y el gurú de la F1 puede ser de gran ayuda para lograr ese tercer título de campeón del mundo, que es el primer objetivo para el ‘14′. “Ahora estoy muy, muy concentrado en la Fórmula 1. Esta es mi primera y única prioridad en este momento. Creo que Aston Martin es el equipo más determinado en el que he estado en mi carrera. El compromiso de este equipo, la visión de nuestro líder, Lawrence Stroll, es algo que nunca había visto antes, y probablemente los resultados que Aston Martin ha conseguido en tres años desde que existe tampoco tienen precedentes, con ocho podios el año pasado. Y ahora también el fichaje de Adrian Newey”, indica el español en un acto promocional en la India de unos de los patrocinadores del equipo.
Cuando pasen esos “dos o tres años”, Alonso tendrá 45 o 46 años, como él recuerda. Lo que no quiere decir que piense en dejar los volantes cuando su aventura en la F1 llegue a su fin. Porque hay más competiciones: las 500 Millas de Indianápolis, la resistencia o el Dakar, disciplinas que ya ha probado. De la carrera norteamericana dice: “De momento no está en mis planes. Lo he intentado tres veces y no lo he logrado. Creo que el compromiso que requerirá ir a la Indy 500, la cantidad de aprendizaje que tendré que volver a hacer... será un poco demasiado”.
No descarta el óvalo al “100%”, pero sí apunta en contraposición al Dakar. Una experiencia que se anotó en 2020. “Será mi gran reto”, comienza diciendo para dejar entrever que si va al desierto será para competir: “Si puedo ganar el Dakar, creo que será muy gratificante para mí personalmente porque puedo ganar en Fórmula 1, puedo ganar en carreras de resistencia, ganar en Le Mans y Daytona, y si puedo ganar también en rally, significará mucho para mí como piloto”.
Lo que significaría es la confirmación de que Alonso más allá de la F1 es un piloto multidisciplinar. Sus dos campeonatos del mundo de F1 se ven acompañado en las vitrinas con la victoria en las 24 Horas de Daytona, las dos veces que ganó las 24 Horas de Le Mans, el Mundial de Resistencia. En el Dakar, en su única aparición, con Toyota, se midió a auténticos especialistas como Carlos Sainz (ganador aquella edición), Nasser Al-Attiyah, Stéphane Peterhansel, Yazeed Al-Rajhi o Giniel de Villiers. Acabó 13º a pesar de su inexperiencia y el aprendizaje que tuvo que tener: “No se puede conducir un coche de Fórmula 1 de la misma manera que un coche de Le Mans, que tiene que hacer 24 horas para ganar la carrera, o el rally Dakar, donde hay que atravesar las dunas y la grava de Arabia Saudí. Así que tuve que aprender y empezar de cero en muchas de esas categorías y rodearme de los mejores pilotos del mundo, específicamente en esa serie, y aprender de ellos y ser humilde. No hay problema en aceptar que no tenía idea de cómo conducir un coche de rally, pero fui día a día mejorando y aprendiendo de ellos hasta que pude competir”, finaliza el asturiano, que tiene, después de la F1, el Dakar en su agenda.