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MOTO2 | JAPÓN

Canet se saca de encima el secreto de la pajarita

Arón esperaba a ganar su primer GP en Moto2 para contarlo, pero tras acabar en el suelo en Motegi la rompió delante de AS y reveló la razón de usarla en el podio.

MOTEGI
Arón Canet rompió su pajarita del podio tras la carrera de Motegi.
Mela Chércoles

Parece que la mala suerte persigue a Arón Canet camino de su primera victoria de Moto2. No es la primera vez que se va al suelo liderando, tal como le sucedió en Motegi, y la pajarita que se pone desde la temporada pasada cada vez que sube al podio de la categoría intermedia, al acabar Japón, empezó a verla más como un peso que le generaba presión o incluso símbolo de mala suerte. Tenía la intención de revelar la razón por la que la usaba el día que por fin gane, lo que hará antes o después, pero el domingo decidió romperla en presencia de AS y contar a este diario el motivo por el optó por ella. El asunto es serio y merece todo el respeto:

“Lo de la pajarita es un mensaje para algunas personas que hay dentro del paddock y fuera de él que me han tachado de tal o cual cosa sin conocerme y por tener tatuajes, de una manera discriminatoria. No eres mejor o peor persona por tener tatuajes. Algunos me veían como un macarra o un asesino por llevar tatuado mi cuerpo, cuando en realidad soy el mismo chaval que cuando tenía 16 años y no los llevaba”, empieza diciendo muy serio el valenciano.

Continúa: “Creo que he demostrado en este tiempo en el Mundial que me puedo subir a un podio tanto con una pajarita como sin ella. Tenemos el mismo gas con tatuajes o sin ellos y soy la misma persona y el mismo deportista de élite, el que se levanta por las mañanas para entrenar en su casa, en Andorra, y tener tatuajes no tiene por qué hacerte mejor o peor persona, lo mismo que llevar una pajarita. Así que desde ahora, a tomar por saco la pajarita y, revelando el secreto de por qué la llevaba, nos quitamos ese peso de encima para las carreras que quedan. Por cierto, que es de madera, pero por nada especial sino porque fue la primera que encontré”.

El del Flexbox HP40 recuerda perfectamente el origen de esta historia: “Me la ponía cuando subía al podio después de Mugello 2021. Resulta que estábamos en negociaciones con varios equipos de varias categorías y algunos me rechazaron porque llevaba tatuajes y de más tonterías. Y fuera del paddock también se me ha tachado de cosas sin conocerme, por mi imagen. Yo puedo entender que a mí me guste el reggaeton y a otro el rock duro, pero por eso no le trato peor o lo voy a discriminar”.

Y sentencia: “Lo que quiero dejar claro es que por tener tatuajes no eres peor persona ni mala gente, ni mucho menos. Eres la misma persona y sigues teniendo el mismo gas, lo que ha quedado demostrado después de siete podios, tres poles y varias vueltas rápidas. Vamos a romper la pajarita”.

Apuesten por su victoria antes de que acabe la temporada...