Bagnaia: “Me molesta un poco el coxis y la rodilla derecha”
“Tuve mucha suerte, porque todos estuvieron extraordinarios a la hora de esquivarme, y también porque faltaban cinco pilotos por la caída en la primera curva”, dice.
Fue un milagro que Francesco Bagnaia saliera del grave accidente sufrido en Montmeló sin lesiones graves que lamentar y verle de vuelta a los cuatro días en Misano sólo ayudado por unas muletas. “Me molesta un poco el coxis y la rodilla derecha bastante”, asegura sobre su estado físico el campeón y líder de la general. Lo dicho, un milagro después de la salida por orejas que sufrió y que Brad Binder le pasara por encima de las piernas con su KTM.
“Digamos que estoy bastante bien. Me molesta un poco el coxis y la rodilla derecha bastante, pues hemos hecho un intenso y muy fuerte trabajo para poder estar aquí y me gustaría agradecer el trabajo realizado a todo el mundo que me ha ayudado para poder estar aquí, pues ha sido dificilísimo. Creo que soy muy afortunado desde todos los puntos de vista, porque estoy rodeado de personas fantásticas que han hecho un trabajo increíble y me siento bastante bien. Y también agradecer su trabajo a Alpinestars, pues me han salvado de una situación bastante complicada y ahora tenemos que probar cómo estamos”, aseguraba el de Ducati.
Sobre si vio las imágenes del accidente y lo que pensó, dijo: “La he visto, porque no soy demasiado impresionable como persona, y he querido recordarlo, aunque fue muy duro, porque seguramente hacía mucho tiempo que no se veía un highside como ese con una Ducati, y después del vuelo que hice tuve mucha suerte, porque todos estuvieron extraordinarios a la hora de esquivarme, y también por el hecho de que faltaban cinco pilotos que habían caído en la primera curva. Aunque luego pasó lo que pasó creo que fui muy afortunado en esa situación”.
Sus sensaciones durante el accidente fueron estas: “Mientras estaba en el aire sólo sentí que explotaba el airbag y me impresionó, porque el vuelo duró bastante. Cuando estaba en el suelo, veía todas las motos que pasaban y sólo pensaba en que pudieran esquivarme. Me consta que Binder intentó hacer todo lo posible, pero no pudo y afortunadamente me pasó en el mejor punto en el que me podía pasar”.
Al preguntarle si Pecco es de acero por la ausencia de lesiones, sonrió antes de contestar que “es difícil dar una explicación válida en estos casos. Seguramente sea por haber tenido mucha suerte y, sobre todo, Alpinestars tiene muchos y muchos años de experiencia en la seguridad de los pilotos y tengo que estarles muy agradecidos por el trabajo que hacen en la protección de las piernas, de la espalda y de todo. Son fantásticos y les debo todo”.
Algo que le ha impresionado al italiano son las muestras de cariño recibido: “Ha sido muy bonito y me ha dejado con la boca abierta. Sirve de mucho recibir todas esas muestras de afecto y no sólo por los resultados sino por todo en general y. la verdad es que todas las muestras recibidas me han dejado sin palabras”.
Ojo a lo que se le pasó por la cabeza estando en la ambulancia: “Sinceramente en mi caso lo primero que pensé en la ambulancia era en volver a mi box para correr después de la bandera roja. Era difícil, pero la voluntad de volver a subirte a la moto es la gasolina más potente que existe, al menos en mi caso, en nuestro caso, es recuperar la dinámica y la motivación cuanto antes”.
Y sobre lo que espera para este fin de semana, aseguró: “Será un fin de semana muy especial en el que habrá que apretar los dientes, pero también es cierto que no estoy al ciento por ciento, aunque probaremos pues ya me tocó llegar aquí con la fractura de tibia y el año pasado con problemas en la espalda en Portimao y Jerez, así que veremos...”.