Aleix: "Este podio es aún más emocionante que Argentina"

Ya no causan sorpresa los podios de Aleix Espargaró con la Aprilia. Tres lleva en lo que va de temporada, la victoria de Argentina y los terceros de Portimao y Jerez. El de hoy supone que Aprilia pierda las concesiones a partir de ahora, pero es algo que no le preocupa.

-Tercero superando en la pelea por esa plaza a Márquez y Miller. ¿Qué tiene que decir?

-Estoy contento. Ha sido una carrera muy frustrante, porque ya sé que lo que tenemos que mejorar es el embrague. Llevo unas salidas desastrosas estas temporadas. Conseguí adelantar a Nakagami, pero no podía adelantar ni a Marc ni a Jack, y era muy frustrante porque tenía mejor ritmo. Ellos apuraban mucho la frenada y se paraban a mitad de la curva y yo no podía hacer paso por curva. Vi que Pecco y Fabio se escapaban, pero era imposible seguirles. Sabía que si lo intentaba golpearía a Marc y me caería, porque él frenaba muy tarde. Ahí me dije que no podía luchar por la victoria, pero sabía que a 40 minutos cometerían algún error. Cuando adelanté a Jack en la última curva, vi que Marc se fue largo y adelanté a los dos a cinco vueltas del final. Aumenté el ritmo medio segundo. No pude llegar a Pecco y Fabio, porque tenían mucho ritmo, pero contento con el tercero final.

-Es segundo de la general a siete puntos de Quartararo. ¿Qué le parece?

-Creo que sí tenemos opciones. Fabio es el campeón del año pasado y ha transcurrido ya la tercera parte del campeonato y estamos a sólo siete puntos del líder. Este tren sólo pasa una vez en la vida, sobre todo en mi caso, y voy a tratar de subirme a este tren. Sé que especialemente con Fabio y con Pecco, cuando están en su momento dulce, aún me falta algo. Tenemos que mejorar algo la moto y yo, pero la constancia y la regularidad será la clave. Me veo muy bien y estoy absolutamente contento, así que voy a tratar de ponérselo difícil a Fabio hasta el final.

-¿Es más especial subir al podio en Jerez?

-Es de locos. Hoy a las seis y media de la mañana, las curvas Nieto y Peluqui estaban a tope. Hacía mucho tiempo que no se veía algo así. Creo que este podio para mí es aún más emocionante que el de Argentina, porque llevo compitiendo aquí desde pequeñito y nunca había conseguido el podio, así que conseguirlo hoy, a los 32 años, batiéndome con los mejores pilotos del mundo, es súper emotivo. Confiemos en mantener la buena inercia en Le Mans.

-¿Qué supone la pérdida de las concesiones para Aprilia?

-Si estamos en la sexta carrera y estamos a siete puntos del líder es porque la moto funciona bien así que lo normal es perder las concesiones y tener las mismas armas que las demás fábricas. Creo firmemente en los ingenieros de Noale. Sé que ellos se van a estresar más, pero a mí no m estresa. Lo más difícil ha sido conseguir este nivel que hemos conseguido. Ahora los motores tendrán que durar un poco más, pero creo que pueden hacerlo.

-¿El incidente de Márquez en la última fue un regalo para ti o ya tenías previsto cómo pasarle?

-Las carreras son así. Mi ritmo era más fuerte que el de Jack y Marc, pero no les podía adelantar. Sabía que tenía que estar muy cerca, enseñándoles la moto. Cada vez que abrían la puerta les enseñaba la rueda para meter presión. Sabía que en 40 minutos, como mínimo, iban a cometer de uno a dos errores. Ya me sentía satisfecho con el quinto puesto, porque era bueno para el campeonato, pero sabía que me llegaría la oportunidad, y que la tendría que aprovechar. En la misma curva en la que cometió el error Marc yo estaba adelantando a Jack. Iba un poco mejor que ellos en el paso por curva, pero Marc frenaba súper bien. Al final pude adelantarles y, en cuanto lo hice, pude abrir la diferencia de dos segundos en cuatro vueltas. Tenemos que mejorar el embrague porque las salidas son un desastre. Menos mal que hoy comenzamos en la primera fila y así limitamos los daños.

-¿Tuvo problemas con la presión y la temperatura?

-Tuve chattering en las curvas de izquierdas yendo detrás de ellos y no podía hacer paso por curva, pero cuando les pasé pude ir medio segundo más rápido y ya no tuve chattering. Vamos al límite y sabemos que sieguiendo a una moto es más difícil, y seguíamos a dos. Con una mejor salida quizás podría haber intentado seguirles.