Victoria de Bagnaia, podio de Aleix y salvada de Márquez

¡Viva Jerez y las carreras de motos! La de MotoGP en este GP de España parecía que no sería para el recuerdo, pero Marc Márquez, una vez más él, se encargó de hacerla inolvidable. El del Repsol Honda no fue en esta ocasión primero, honor que correspondió a Francesco Bagnaia; ni segundo, porque lo fue Fabio Quartararo; ni tercero, privilegio reservado a Aleix Espagaró. El Trueno de Cervera fue cuarto, pero la salvada que protagonizó a cinco vueltas del final fue tan milagrosa, alucinante y única como las de los viejos tiempos. El mejor Márquez está de vuelta y, en cuanto le coja el pulso a la nueva Honda, volverá a luchar por la victoria.

La salida fue delicada para Márquez. Partía quinto y quinto se quedó después de verse emparadado entre Jack Miller y Aleix. Antes de acabar la primera vuelta, se deshacía de Nakagami y, a partir de ahí, un montón de vueltas por detrás de Miller y por delante de Aleix, sin importarle que por delante se escaparan paulatinamente 'Pecco' y 'El Diablo'. Su guerra ni la de nadie iba con ellos, porque habían exhibido un ritmo claramente superior a los demás que pusieron de manifiesto desde la salida.

El de Ducati lideró de principio a fin para regresar a la senda de la victoria, desde la pole, con vuelta rápida de carrera y liderando todas las vueltas. Perfecto. Es su primer triunfo del curso, porque no ganaba desde Valencia 2021, y se convierte en el quinto ganador diferente de la temporada, después de que lo hayan hecho antes Bastianini (en dos ocasiones), Oliveira, Aleix y Quartararo. El vigente campeón no tiró la toalla en ningún momento, pero tampoco pudo meterle rueda al subcampeón de la pasada temporada y cruzó la meta a 0.285 de la cabeza.

El tercero fue Aleix, a once segundos del ganador, con lo que son ya tres podios los que lleva el de Granollers este año y con el de Jerez alcanza el sexto punto que le quita a Aprilia definitivamente las concesiones que tenía en el reglamento para la próxima temporada. Lo que entra inmediatamente en vigor para la casa de Noale es la cancelación del privilegio de entrenamientos ilimitados en lo que queda de campeonato.

Estuvo muy listo Aleix para lograr esa tercera plaza. Marc lanzó su ataque sobre Jack a cinco vueltas del final, en el rapidísimo viraje de Sito Pons (curva 5). Al llegar a la curva de entrada a meta, el mayor de los Espargaró se lanzó también a por el australiano, por la cuarta plaza, y tuvo el premio extra de la tercera posición al salirse Marc de la trazada y estar a punto de irse al suelo. Lo evitó con una salvada made in Márquez y supuso la imagen de la carrera. Recuperó la verticalidad en la cuarta plaza, pero Miller le superaba en la frenada de final de recta. De ahí a meta, a remar de nuevo y otro pasadón para el recuerdo sobre Miller en la última vuelta, en Aspar, en un punto rapidísimo, de iquierdas.

De toda esa batalla se favoreció Mir para acercarse al trío que peleaba por el último pedaño del podio, pero su esfuerzo sólo le dio para ser sexto a 0.9 de Miller. Más atrás terminaron Pol 11º, Álex Márquez 13º, Maverick 14º, Rins 19º (tuvo una salida de pista delicadísima en Ferrari) y Martín 22º. El madrileño fue uno de los que se cayó, como Bradl (dos veces), Darryn Binder y Zarco, pero reanudó la marcha y con vergüenza torera completó la carrera, último y a más de un minuto de la cabeza. Tendrá oportunidad de revancha dentro de dos semanas, en Le Mans, donde seguramente a Márquez ya no le valga el cuarto como buen resultado, el mejor del año hasta la fecha, dado que en el vital test de mañana deberá poner la Honda definitivamente a su gusto y empezar a buscar victorias que le permitan soñar con el título. De momento, está complicado, pero no imposible, porque son 45 puntos los que le saca Quartararo aún con 15 GGPP en juego. Hay tiempo, mucho tiempo, para remontar.