El duro invierno de Marc Márquez según Álex Márquez

El tercer episodio de la diplopía o visión doble tendrá por un tiempo indefinido en el dique seco a Marc Márquez. La última vez está muy reciente, porque sucedió el invierno pasado, y en ese tiempo de recuperación el del Repsol Honda encontró un apoyo muy importante en su hermano Álex, con el que convivía antes en su Cervera natal y ahora en Madrid. AS habló con el pequeño de los Márquez antes de que arrancara en Qatar la temporada 2022 sobre cómo había sido el invierno de su hermano. Sus palabras pueden servir ahora para hacernos una idea de lo que le espera al ocho veces campeón...

"Yo estaba tranquilo y confiaba en su vuelta. Le he visto. salir de esta y de otras peores. Bueno, no, esta vez ha sido la más jodida, la verdad y hablando claro. Ha habido momentos críticos, de tener que animarle. En diciembre hice yo un parón de moto también para que él estuviera más tranquilo y para estar más con él. Luego, cuando empecé a activarme de nuevo con mi pretemporada, él sí que estaba más inquieto. Somos hermanos, pero también corremos juntos y él veía que un rival ya estaba entrenando y que él no podía hacerlo. Yo entendía su intranquilidad e inquietud pero, con sus altos y bajos, lo ha llevado muy bien. Al menos de cara a los que estábamos a su alrededor. Y lo más importante es que se dio el milagro y se arregló", aseguraba un Álex que no imaginaba entonces que los problemas se reproducirían tan pronto en su hermano.

Las expectativas que Álex tenía depositadas en Marc para este año eran enormes. Estas eran sus razones: "Llegando al punto que ha llegado, todo lo que ha pasado sólo le puede hacer más fuerte y tener más hambre que nunca. Así es como le veo. Que le va a costar más o menos, puede ser, pero como coja su punto, como estaba antes de hacerse daño otra vez el año pasado, ese Marc es difícil de ganar. Y más a 21 carreras como hay este año. Le veo ganando otro título y muchos más, porque le veo entrenar cada día. Es un depredador, un purasangre, un caníbal que siempre tiene hambre. Lo ves trabajar y parece que no tenga ningún título. Parece que esté luchando por su primer Mundial, y eso es lo mágico que tiene él. No vive del pasado sino del presente".

Por fortuna, y según reza el comunicado del equipo, el problema en esta ocasión parece menos grave que en el episodio anterior, cuando Marc se tuvo que tirar dos meses y medio haciendo reposo, y tres hasta volver a subirse a su Honda de MotoGP.