Ferrari vuelve a asustar
En el paddock apuntan al F1-75 y su motor como los más fuertes según el GPS, con McLaren cerca. Mercedes prepara un ‘coche nuevo’ para Bahréin.
La última tabla de tiempos de Barcelona recuperó el orden establecido, Hamilton y Russell; Pérez y Verstappen, pero la clasificación nunca es una buena herramienta para analizar lo que ha sucedido en unos test de pretemporada. Menos en Montmeló, solo la primera toma de contacto de los monoplazas de 2022. Los cronos tienen asteriscos, Mercedes recurrió a compuestos muy blandos (que no se utilizan en el GP de España) y el rush final del heptacampeón inglés, sin competencia en la pista y con Verstappen ya en el jet privado de regreso a casa, pareció más una reivindicación que una exhibición de prestaciones.
La realidad, lo que se masca en el paddock, es otra cosa: según transmiten fuentes de los equipos, Ferrari tuvo el coche más fuerte en el Circuit a juzgar por las herramientas de análisis por GPS, y McLaren está a la altura. El F1-75 de Sainz y Leclerc se reveló como un monoplaza muy capaz, agresivo en su concepto y ágil en las variadas curvas de Barcelona. "Tiene el mejor motor", se escuchó decir a Toto Wolff. Con el compuesto C3, y sin conocerse la carga de combustible o los mapas de motor utilizados, las sensaciones de ambos pilotos fueron muy buenas. El MCL36, más convencional en su diseño, resultó convincente en manos de Norris y Ricciardo y es el coche que inquieta a Helmut Marko. "No fuimos a por tiempos", dicen todos.
Cualquier lectura debe hacerse con reservas: Mercedes prepara un paquete de evoluciones muy ambicioso para los test de Sakhir, puede decirse que traerán un coche nuevo (aunque no parezca lo más eficiente con el techo de gasto implementado) y el RB18 completó unos entrenamientos muy sólidos si se omite la avería en la caja de cambios del jueves. Con todo, el número de vueltas completadas en los tres días de pruebas destaca a Ferrari (439) por delante del Mercedes (393), McLaren (367) y Red Bull (358). Y las vueltas sí son un buen indicador en los test.
"De Mercedes no me creería mucho"
Russell apuntó a "un coche rojo y uno naranja" como los posibles rivales. Sainz no entra en el juego: “De Mercedes no me creería mucho sabiendo lo que han hecho en los últimos años". Binotto, al frente de la escudería, pasa por alto los comentarios de la competencia: "Estamos contentos porque hemos dado muchas vueltas y hemos aprendido del coche y recogido datos. Sobre las prestaciones, es muy pronto, espero que otros coches sean muy rápidos y tengan mejoras en Bahréin. Lo importante es ser consistente y rodar".
"Hay problemas que corregir y potencial que extraer. En Maranello se revisarán todos los datos para optimizar este coche. No creo que nuestro ritmo sea tan fuerte como muestran los datos", dice el ingeniero suizo de origen italiano, que además confirma que los ajustes realizados por el equipo han resuelto el problema de balanceo o ‘porpoising’: "Ya no es un problema". En los próximos días, las fábricas analizarán los datos recogidos en el asfalto catalán y prepararán nuevas evoluciones para llevar a los test de Bahréin (10-12 de marzo). Allí sí habrá simulaciones de clasificación y tandas de carrera serias. Los datos serán más claros.