Márquez se exprime
El piloto de Honda no se ha bajado de la moto desde que realizara el pasado domingo su primer test tras su lesión ocular: trabajó en Aragón con una 600 y el fin de semana hizo motocross.
Marc Márquez no para. Su recuperación de la diplopía que le hizo perderse el tramo final de la temporada pasada marcha satisfactoriamente y el octocampeón de MotoGP no deja de montar en moto para recuperar sensaciones y así llegar en la mejor forma posible a los test de pretemporada de Sepang los próximos 5 y 6 de febrero.
Tras anunciar en rueda de prensa oficial de los pilotos de HRC que sus problemas de visión habían desaparecido, el pasado domingo volvió a subirse a la moto después de tres meses de inactividad para valorar sobre el asfalto de Portimao y a 300 km/h la evolución de su lesión. “He pilotado no he tenido ninguna molestia con la visión”, dijo Márquez tras la prueba.
Con todo en orden, el piloto del Repsol Honda ha continuado esta semana con su preparación y no ha dejado la moto de lado. Primero estuvo en MotorLand, trabajando con una CBR 600 sobre el trazado de kárting del circuito aragonés. Un trabajo enfocado a seguir con sensaciones sobre la moto y también muy físico, ya que al tratarse de una variante corta y muchos cambios de dirección, es fundamental ‘mover’ con agilidad los 160 kg de la montura de calle del ‘ala dorada’.
Y tras el asfalto, el fin de semana ha sido turno del barro. Márquez estuvo en el Mx Golf Park practicando motocross, según publicó el piloto en sus canales oficiales.