La suspensión trasera de Mercedes inquieta a Red Bull
En Milton Keynes sospechan que la altura del coche de Hamilton varía en función de la velocidad. El W12 ha pasado todas las verificaciones.
Verstappen llega a las últimas cinco carreras de la temporada con 12 puntos de ventaja sobre Hamilton. "Ahora habrá circuitos buenos para ellos y otros buenos para nosotros", augura el jefe de Red Bull, Horner. México y Brasil son, en teoría, favorables para el RB16B y Qatar beneficiará al Mercedes, aunque este año ya ha habido unas cuantas sorpresas. Sin ir más lejos, en Austin era Hamilton el principal favorito hasta que el neerlandés le noqueó desde la clasificación.
A pesar de la euforia por el triunfo más el podio de Pérez, alrededor del hospitality energético se percibía en Estados Unidos cierta inquietud en torno a la suspensión trasera del W12 que pilotan Hamilton y Bottas. A partir de diversos vídeos de cámaras on-board, sospechan que la altura del coche varía en función de la velocidad del monoplaza. Cuando superan los 200 kilómetros por hora el coche pierde centímetros y, por tanto, resistencia al aire. Los recupera cuando disminuye la velocidad, así que no se altera la carga aerodinámica en curvas. Parece claro el qué, pero no tienen claro el cómo, ni que sea ilegal.
Otras escuderías recurren a sistemas similares, aunque no tan exagerados, si bien Aston Martin, que utiliza la misma suspensión trasera de Mercedes, no lo tiene. Si fuera una solución útil, tampoco habría tiempo para incorporarla porque no llegaría ni siquiera para el GP de Abu Dhabi que cierra la campaña. Toto Wolff despeja balones fuera y el resultado en COTA ayuda a cambiar de tema de conversación, porque ahora es Red Bull quien parece tener la sartén por el mango ante el intenso final de curso.
La técnica ha sido campo de batalla en 2021, aunque ya quede lejos en el tiempo. Mercedes recurrió ante la FIA los alerones traseros flexibles de Red Bull, que cedían varios centímetros en función de la velocidad. Se prohibieron desde Paul Ricard. Otros equipos, como Alpine o Alfa Romeo, sufrieron daños colaterales en esa pelea, porque debieron revisar sus diseños. También hubo sospechas y quejas sobre las mejoras de potencia de Honda en verano (no está permitido incorporar las prestaciones, solo fiabilidad).
Con cinco carreras por delante, hay 153 puntos en juego: 25 por gran premio, uno por cada vuelta rápida más tres para el vencedor del sprint en Interlagos. La diferencia entre Verstappen y Hamilton es mínima y el campeonato de constructores también llega abierto a la fase decisiva, con solo 23 puntos de margen entre Mercedes y Red Bull. La próxima semana, la Fórmula 1 regresa en el Autódromo Hermanos Rodríguez de Ciudad de México. La enorme recta favorece a Hamilton, las curvas lentas son para Verstappen y la hinchada que abarrotará las gradas alentará con fuerza a Sergio Pérez.