"Sabía que Marc no había perdido una pizca de su magia"
Álex Márquez se cayó en la carrera de Sachsenring, lo que no quitó que luego estuviera a pie de podio, para celebrar junto a su hermano un triunfo 581 días después del anterior.
No tuvo Álex Márquez su mejor día en Sachsenring, porque se cayó a las primeras de cambio y se llevó con él al suelo a Petrucci. Sin embargo, acabó la prueba alemana con una sonrisa de oreja a oreja, por ver de nuevo a su hermano Marc, 581 días después, en lo más alto del podio.
-¿Cuánto compensó el regreso a la victoria de su hermano Marc el disgusto que se llevó por su caída?
-Él se lo merece y yo tenía clarísimo que en Alemania sería competitivo. No sé si tanto como para ganar la carrera, pero ha sido un buen fin de semana para Honda, en general, y para mí también, aunque mi resultado de carrera no fuera el deseado. Marc lo ha hecho muy bien. Ha salido muy bien, ha atacado cuando tenía que atacar y, cuando cayeron cuatro gotas de lluvia, supo arriesgar y pudo mantener el ritmo, que era una duda que teníamos todos, por el grip, pero el lo ha clavado una vez más.
-¿Llegó a temerse en los malos momentos que nunca más volvería a verle ganar?
-No. Cuando hay momentos duros, las críticas llueven y es normal. Es normal que una fábrica tan grande como Honda tenga críticas y malos comentarios en esas circunstancias, pero hay que seguir creciendo. Es una fábrica muy grande, con mucho poder de reacción, así que hay que seguir trabajando, porque muchos problemas que no hemos tenido aquí los tendremos en otros circuitos. Creo que Holanda será volver a la realidad, pero sí que aquí se han visto pasos positivos.
-El penúltimo podio de Honda lo había hecho usted, el año pasado en Aragón, y la sequía la ha terminado su hermano Marc. ¿Con él todo es más fácil?
-Sí, seguramente. La presión dentro de la fábrica se focaliza más en él. Yo el año pasado me sentí un poco solo dentro del box cuando él se lesionó, y con todo el foco encima de mí siendo un rookie. Él marca el camino con esta moto y conoce mejor que nadie, junto a su equipo, esta moto. Se han solucionado algunos problemas y es por el trabajo que hemos hecho todos.
-¿Qué significa a nivel sentimental y personal ver ganar a su hermano 581 días después?
-Significa mucho y nunca dudé que llegaría este día por su parte, porque trabaja mucho. Le he visto entrenar con diversas motos y que llegaría, que no había perdido ni una pizca de esa magia que tiene él aunque no esté recuperado al cien por cien. Muchas veces se tiraba mucha culpa encima y yo le decía que estuviera tranquilo, porque creo que no estábamos en el mejor momento con la moto. En Montmeló se quedó tranquilo, porque vio que había problemas reales e hicieron la presión que tenían que hacer. Sabía que aquí tendría esa oportunidad. Yo no tenía ninguna duda.