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F1 (MÓNACO) | LIBRES 3

Ferrari se frota los ojos

Manda Verstappen con Sainz a 47 milésimas y Leclerc tercero. Los dos coches de Maranello pueden luchar por la pole. Alonso 15º. Dos banderas rojas.

Mónaco
Carlos Sainz (Ferrari SF21). Mónaco, F1 2021.
GONZALO FUENTES

Verstappen, Sainz y Leclerc deben ser los tres pilotos que luchen por la pole si todos han mostrado sus cartas en el último entrenamiento libre de Mónaco. Increíbles los de Ferrari, confianza por las nubes entre los muros de Montecarlo y vueltas brillantes, una tras otra, conforme mejoraban las condiciones del asfalto (llovió de noche). El madrileño y el monegasco se intercambiaron golpes al frente de la clasificación hasta que entró Red Bull con Max y logró la vuelta más rápida. A 47 milésimas minúsculas quedó Carlos, segundo, y un par de décimas más atrás está Charles. Faltaron, no obstante, los intentos finales de ambos con un juego de neumáticos poco usado: dos banderas rojas acortaron la tercera sesión.

Ferrari se frota los ojos con el SF21 en su mejor fin de semana de la temporada, de largo, y Mercedes todavía no ha llegado, aunque se especula que han rodado con el motor limitado. Bottas fue cuarto y Hamilton séptimo, el campeón por detrás de Checo y Norris, y al menos a uno de ellos se les espera delante con los tres pilotos que han mostrado mejor nivel hasta ahora. Raikkonen, Gasly y Vettel cerraron el teórico top-10 que valdría una Q3.

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Alonso quedó 15º, malas sensaciones en Alpine hasta ahora con Esteban Ocon como farolillo rojo. Chocaron contra los muros Latifi, en la Piscina, y Mick Schumacher, después del Casino. La limpieza de los restos obligó a clausurar la mañana minutos antes de lo previsto.

La clasificación se presume espectacular, las vueltas rápidas han llegado con neumáticos que superaban la docena de pasos por meta así que compensará dejar el coche en la pista el máximo tiempo posible antes que pasar por el garaje y montar un juego nuevo. Puede ser un gran día para Maranello, o quedar como el enésimo ejemplo de que los grandes se lo guardan todo hasta la clasificación. Pero, al menos, hay emoción máxima en los instantes previos.