Pole de Quartararo por sanción a Bagnaia y sexto de Márquez
El de Ducati perdió el mejor crono por hacerlo con bandera amarilla en pista tras la caída de Oliveira. Rins se metió segundo y Marc remontó desde la Q1.
Puño cerrado de alegría y sonrisa de oreja a oreja en el rostro de Marc Márquez al acabar la Q2 del GP de Portugal. El del Repsol Honda salvó los muebles con mucha solvencia en una jornada que había empezado complicada para él. Su sexto puesto para la parrilla en la carrera de Portimao es un excelente resultado dadas sus circunstancias personales, porque reaparece tras nueve meses en el dique seco por lesión, también porque tuvo que pasar por el purgatorio de la Q1 y, sobre todo, porque se tiró diez minutos observando la sesión oficial desde el box y estirando y soltando su brazo derecho un buen rato antes de arrancar a 4:43 del final. Fue inquietante verle así, pero llegada la hora de la verdad, cumplió.
Lo que no pudo hacer el ocho veces campeón esta vez fue entrar en la pelea por la pole y se tuvo que conformar con el séptimo mejor crono de los doce pilotos que había en pista. Sin embargo, heredó una posición al ser cancelada la mejor vuelta de Francesco Bagnaia, la que le daba la pole, por conseguir su registro con bandera amarilla en la pista por la caída de Oliveira. Antes de eso se buscó la vida en la Q1 recurriendo a la rueda de Mir, lo que molestó al campeón, porque dijo que le estorbó y recordó después que eso se sanciona en las otras categorías... Ya en la Q2, también jugó con la otra Suzuki, al salir en paralelo con Rins desde el pit lane, pero éste se rió y dijo que estaban hablando entre ellos de casco a casco vía bluetooth. Marc, por su parte, contó después que se había buscado la vida como había podido tras tanto tiempo de inactividad.
Volviendo a lo sucedido, con Bagnaia, el de Ducati había hecho un tiempazo que suponía la mejor vuelta dada al trazado del Algarve con una moto, pero su suspensión le dejó relegado a la undécima plaza. Puede verse como una injusticia, pero es lo que marca el reglamento. Con bandera amarilla es inútil tirar y, de hecho, es obligado cortar.
El gran beneficiado de esa sanción fue Fabio Quartararo, que heredó la pole y cortó así la secuencia de primeros puestos en parrilla para pilotos Ducati de esta temporada. El propio Bagnaia la había firmado en Qatar 1 y Martín se la llevó en Qatar 2. El novato, esta vez, se perdió la jornada vespertina del sábado fruto de su dura caída en el FP3 de la mañana.
Sufrió una conmoción por la que deberá pasar 24 horas en el hospital de Faro, pero lo peor es que sufrió dos fracturas en el primer dedo de la mano derecha, otra en el maléolo medial del tobillo derecho, todas ellas operables, y una mano en un metatarsiano de la mano izquierda que no requiere operación, según informó el doctor Ángel Charte.
Volviendo a la Q2, sensacional segundo puesto de Rins para la parrilla. El de Suzuki tiene muy buen ritmo y al fin un puesto buenísimo a la hora de la salida. La primera línea la cerrará Zarco, con un tercer puesto que tiene un mérito enorme porque se cayó al principio de la sesión. La segunda línea ha quedado para Miller, Morbidelli y Márquez.
La tercera, para Aleix, Marini y Mir, que llegó a la Q2 procedente de la Q1, con la segunda plaza tras Marc. La cuarta línea ha sido para Oliveira, Bagnaia y un Maverick al que le quitaron hasta tres vueltas, por exceder los límites del trazado y por lo de dar gas a tope con bandera amarilla en pista. Más atrás saldrán Álex Márquez 13º, Pol 14º (sufrió una dura caída al salir por orejas en la curva de entrada a meta, pero sin consecuencias importantes), Rossi 17º y Lecuona 19º.