Sainz: "Estoy desmoralizado y disgustado, esto no es el Dakar..."
"Llevo 14 dakares y nunca en mi vida me había perdido en dos días media hora. Parece más una gymkana que un rally", dice contrariado el madrileño.
A Carlos Sainz se le puede notar la desesperación al volante en un vídeo publicado en redes por la organización. En él, da hasta cuatro volantazos con el Mini para cambiar de sentido en una misma zona e intentar dar con el rumbo correcto. Otro día más sufriendo con la navegación junto a Lucas Cruz en un Dakar que no le gusta en lo que se ha convertido según reconoció justo al finalizar la especial del día: "Estoy un poco desmoralizado, disgustado".
"El rally parece más una gymkana que un rally raid. Llevo 14 dakares y nunca en mi vida me había perdido en dos días media hora. Esto no es el Dakar. Nunca hemos visto perderse a todo el mundo, buscando el punto de control... Esto no es lo que me gusta. Es más una lotería, esto no es pilotar, estoy bastante harto de esto", comentaba con un importante enfado el madrileño tras perder media hora al principio de la quinta etapa y acabar cediendo 15 en meta.
Más tarde, cuando llegó al vivac de Al Qaisumah, AS le estaba esperando como cada día para hablar más detenidamente con él. Y aclaró que no está "enfadado": "Es simplemente que para mí el rally ha cambiado de filosofía del roadbook y no es cuestión de saber navegar o no. Es otra filosofía que no hemos sabido interpretar o entender y parece más un Dakar de copilotos que de pilotos. Antes, el roadbook siempre ha intentado ayudarte para dirigirte, ahora parece que lo que trata es de pillarte".
"Nos hemos perdido tres veces, pero tener la sensación de no ir por el sitio adecuado, un montón de ellas más. Hay cruces que no se ven que normalmente antes te los marcaban muy bien, es diferente. Hay quien lo ha entendido, pero nosotros no, al igual que mucha gente. Y defiendo a Lucas porque es una cosa a la que no estábamos acostumbrados y que nunca se había hecho así. No es saber navegar con un rumbo, porque en las dunas no nos perdemos, es por caminos en los que hay cruces", explica.
Se quita "el sombrero con los que van en cabeza y lo están haciendo mucho mejor", pero insiste en que "es una lotería": "No me gusta, porque prima más el copilotaje, el ir despacio para ver bien un cruce... Sobre gustos no hay nada escrito y puedo expresar mi opinión de que me guste menos, no es cuestión de que me vaya peor o mejor, es la sensación de tener que ir a 2 por hora para encontrar un camino que no se ve. Pero hay que entenderlo y aceptarlo". Y eso que está "contento con el coche y con todo, pero ir perdiendo de media hora a media hora...".