Al Attiyah y Peterhansel sonríen
El qatarí ganó la etapa y el francés el liderato. Sainz perdió tiempo al tener que abrir pista entre las dunas: nueve minutos con Nasser y siete con su compañero.
Sainz sabe bien cómo va esto, por eso fue el único que no se emocionó más de la cuenta con su victoria en la etapa inaugural. "Mañana me toca abrir y perderé tiempo", anticipaba el madrileño nada más bajarse del Mini. Algunos le verían pesimista, nada de eso, simplemente es realista y seguro que le hubiera gustado equivocarse en su pronóstico, pero no lo hizo. Perdió tiempo, en efecto, pero ni antes había que celebrar, ni ahora que lamentar. Fueron nueve minutos con Al Attiyah, el ganador del día, y menos de siete con Peterhansel, quien sube al liderato.
Apenas hubo que esperar al segundo día para que los tres claros favoritos a ganar este Dakar tomasen la iniciativa. Ocuparon prácticamente en todo momento las tres primeras plazas de la especial de Bisha a Wadi Al Dawasir con importantes zonas de dunas, pero el único que no estuvo nunca al frente de los tiempos fue Carlos. La faena típica de abrir pista... Como ayer, estuvo cerca de Peterhansel durante muchos kilómetros, pero en el tramo final del día perdieron cinco minutos por problemas de navegación y se le escapó un poco el francés, quien llegó a adelantarle en la arena.
Eso fue lo que penalizó a 'Monsieur Dakar' y le dejó sin victoria, porque por detrás venía Al Attiyah en una posición ideal (partió 10º) dispuesto a amargarle el día a los de Mini y se puso al frente justo cuando Stéphane adelantó a Carlos. Al final, el qatarí cruzó la meta en 4h 03:14, con el galo a dos minutos y medio de distancia. Esto deja la general, que sufrió leves cambios ayer a última hora al anularse un par de zonas por un error de cronometraje, con Peterhansel líder, Sainz segundo a seis minutos y medio y Al Attiyah tercero a más de nueve.
Quedó claro que no fue una etapa que jugó en favor de los intereses españoles, no solo por el tiempo perdido del madrileño y Lucas Cruz, sino también por el que cedió Nani Roma. La mala suerte volvió a caer en el equipo BRX pero, al contrario de lo que sucediese ayer cuando Loeb se descolgó de los mejores, fue el catalán el que esta vez se dejó una sangría de minutos. Hasta 35. Seguro que está justificado por algún problema, no es por ritmo, pero de una forma u otra en Prodrive tendrán que esperar otro año para luchar con Mini y Toyota.
Otro español, Esteve, llegó a meta cediendo más de 56 minutos con su Hilux. Volviendo a la zona noble de la etapa, Al Rajhi y Serradori cumplieron su papel de secundarios de lujo y se cerraron las cinco primeras posiciones, ambos a 10 minutos de Al Attiyah. Sin embargo, es Przygonski quien aparece en ese Top 5 si hablamos de la general en lugar del saudí. Pero los puestos de podio, están reservados para el trío de favoritos si consiguen salvar los problemas. Cómo se ordenarán al final está por ver, pero hoy a Sainz le tocó la de arena.