El Red Bull está de oferta
Duro accidente de Albon sin consecuencias físicas para el piloto, pero que tiran por tierra su futuro en el equipo. Hamilton al frente y Sainz, 13º sin vuelta rápida.
Helmut Marko busca fuera desde hace tiempo, quiere a Sergio Pérez o Nico Hulkenberg en ese coche a partir del año que viene, y al soberbio dirigente austriaco no le gusta que sus pilotos manden al desguace un coche en un entrenamiento libre, y menos cuando en este triplete de grandes premios arábigos los repuestos están limitados por el factor logístico. Sólo una actuación brillante de Albon, de 24 años, puede salvarle. Pero ya ni siquiera parece factible un descenso al segundo equipo, Alpha Tauri, porque con Gasly y Tsunoda estaría ocupado.
La opción de Pérez es satisfactoria para Red Bull en el plano técnico, es un piloto con sobrada experiencia y podios, y también en el balance económico, porque llega con importantes patrocinios mexicanos. La Fórmula 1 estaría por la labor, porque asegura la continuidad del GP de México en el Hermanos Rodríguez. Hulkenberg es el candidato favorito de los Verstappen y Albon queda como solución continuista, compañero cómodo para Max y de origen tailandés, como los propietarios de la bebida energética.
Mandó Hamilton sobre Verstappen y Bottas
Las comparaciones son odiosas y en este caso, fulminantes: mientras tanto, en el mismo entrenamiento, Max Verstappen se defendía, no tan lejos del Mercedes. El neerlandés lideró buena parte de la sesión y sólo Lewis Hamilton le alcanzó casi sobre la bocina, cuando nadie más estaba ensayando vueltas rápidas. El campeón acabó con tres décimas de ventaja sobre Max y Bottas con un digno cuarto de Sergio Pérez (Racing Point), seguido de Daniel Ricciardo (Renault).
Carlos Sainz acabó con el 13º registro, pero no es vinculante: estaba volando, con el récord del primer sector en ese momento, cuando se encontró con el amasijo de fibra de carbono que fue el Red Bull. Entonces hubo bandera roja, que se repitió cuando apareció un perro por la pista,y el madrileño se quedó sin intento con el neumático blando al volante del McLaren. Su vuelta la marcó con la goma media, así que hay décimas de margen y las sensaciones son buenas: fue cuarto en la sesión matinal por detrás de los Mercedes y Checo.