"Nunca había sentido esto en un coche de Fórmula 1"
Manda Bottas en Portimao antes de la clasificación. Los pilotos celebran los desniveles aunque echan en falta agarre. Sainz, séptimo con el McLaren.
El Autódromo Internacional del Algarve convence a los pilotos de primeras ante el GP de Portugal. El circuito acogió carreras de Le Mans Series o GT y algunos test con monoplazas del más alto nivel, pero para esta pista construida en 2008 y diseñada por el local Ricardo Pena, es su bautismo con un Mundial de la FIA. Las sensaciones son buenas, los pilotos están descontentos con su falta de agarre (fue reasfaltado hace poco) pero emocionados con las enormes pendientes.
"Es un circuito complicadísimo, las ondulaciones son increíbles y hay muchos sitios en los que no ves adónde vas. La Curva 8 miras al cielo durante bastante tiempo y no sabes dónde vas, lo mismo en la Curva 11. Un desafío, además la superficie es muy deslizante y por eso vemos tantos errores", dice Lewis Hamilton (Mercedes). Para Charles Leclerc (Ferrari), “es extremadamente deslizante, la parte trasera del coche se mueve para todos los lados aunque eso va mejorando. La pista en sí es espectacular, se necesitaron unas vueltas para tener ritmo porque no se ve ninguna curva. Pero en cuanto coges el ritmo las sensaciones son buenas".
Más descriptivo es Pierre Gasly (Alpha Tauri): "En las primeras vueltas lo notas en el estómago, es como una montaña rusa. Después de la Curva 8 subes y luego desciendes. Nunca había sentido eso en un coche de Fórmula 1. Es desafiante con tantas curvas ciegas, alta velocidad, baja velocidad… un circuito poco habitual". Aunque su primer sector es algo inocuo, en el segundo y el tercero hay desniveles muy, muy interesante.
En cuanto a la competición, al menos antes de la clasificación de la tarde, la ventaja de Mercedes parece más pequeña este fin de semana. Valtteri Bottas fue el más rápido también en el tercer entrenamiento libre con 26 milésimas de renta sobre Lewis Hamilton. Verstappen quedó a décima y media con la sorpresa de Gasly, cuarto a 0.2.
Se reducen las diferencias a la espera del fuego real. Charles Leclerc fue sexto con el Ferrari y Carlos Sainz dejó séptimo al McLaren a medio segundo de la cabeza de carrera. Racing Point se entonó, Checo Pérez ya tiene a tiro al madrileño, pero Renault todavía anda resolviendo problemas en el coche de Ricciardo. Con todo, se presume un sábado interesante. El domingo puede ser otra cosa: Portimao emociona, pero hay pocos puntos de adelantamiento, al menos sobre el papel.