Carlos Sainz, Premio Princesa de Asturias de los Deportes
El piloto madrileño, ganador de la última edición del Rally Dakar, fue premiado por su fabulosa trayectoria deportiva en el automovilismo.
El rey de los rallys es también desde hoy Premio Princesa de Asturias del Deporte. Carlos Sainz Cenamor, madrileño de 58 años, doble campeón del mundo y triple ganador del Dakar, ha sido el elegido por el jurado del prestigioso galardón en su edición 2020. El año en el que se cumplen tres décadas de su primer título mundial, y también el año en el que ha culminado su tercera victoria en el Dakar, se salda una deuda histórica.
Su impresionante trayectoria deportiva y su intachable vida personal han resultado merecedoras del premio más prestigioso del deporte en España y uno de los más importantes del mundo. Han sido numerosas las ocasiones en las que se ha presentado su candidatura, casi tantas como éxitos ha logrado en el automovilismo. Y no son pocos, ya que lleva tres décadas en la cúspide. Desde que en 1990 lograra sus primeros triunfos en el Mundial de Rallys hasta que el pasado mes de enero sumara su tercer Dakar, Sainz ha sido una fuente inagotable de alegrías para los aficionados españoles.
El ‘matador’, como lo apodara Juha Kankkunen en sus inicios en el Mundial, se convierte en el cuarto deportista del motor que consigue el Princesa de Asturias. Anteriormente se les concedió a Sito Pons, Fernando Alonso y Michael Schumacher. Entra en una galaxia que inauguró Sebastian Coe en 1987 y subirá al estrado del Teatro Campoamor en Oviedo como antes lo hicieron otros de los españoles que nos han hecho vibrar con sus gestas: Severiano Ballesteros, Miguel Indurain, Rafa Nadal o los hermanos Gasol entre otros forman parte de la historia del premio que ahora hace justicia con Sainz, el que atesora la trayectoria de éxitos más longeva.
Un premio que es la guinda del pastel en un año muy feliz para el madrileño. Lo inauguró ganando el Dakar, ha sido elegido mejor piloto de la historia del Mundial de Rallys, y su hijo acaba de firmar para correr con Ferrari en Fórmula 1. Aquel chaval que con 16 años comenzó a lograr triunfos en squash soñando con cumplir 18 para sacarse el carnet y poder correr en coches, su sueño, y que lo ha hecho realidad ganando todo en rallys y el Dakar, ahora también es Premio Princesa de Asturias. Un galardón merecido y añorado que no va a suponer la culminación de su carrera. Porque quiere volver a ganar el Dakar, y si nada lo impide, estará en Arabia en enero con 58 primaveras, dispuesto a prolongar su leyenda eterna.