McLaren y el problema que va más allá del clon de Mercedes
Andreas Seidl, jefe de la escudería, opina sobre los avances de Racing Point y Alpha Tauri copiando a sus socios: "Nosotros no queremos seguir a otros".
McLaren avanza constante, casilla a casilla, pero otras escuderías medianas de la parrilla han dado un salto mayúsculo este invierno apoyados en sus socios o fabricante de motores. No es ningún secreto que el Racing Point RP20 de Pérez y Stroll es un clon del Mercedes W10 que ganó el Mundial el año pasado, igual que el Alpha Tauri AT01 hereda casi toda la aerodinámica del Red Bull RB15 además de caja de cambios y suspensiones. De golpe, se encuentran con un monoplaza que hace pocos meses era capaz de ganar carreras que les llega, además, perfectamente puesto a punto. Si bien son coches que apenas evolucionarán durante la temporada, en las primeras carreras estarán un paso por delante de McLaren o Renault. Con todo, eso no es lo que más preocupa a Andreas Seidl, jefe de la escudería británica.
Preguntado por AS, el ingeniero alemán es claro: con un techo presupuestario aproximándose, no quiere ni oír hablar de equipos que puedan llegar a compartir recursos. "Para este año no me preocupa, nos centramos en nosotros mismos y es importante que demos un paso más como equipo en cuanto a rendimiento y fiabilidad. Hay reglas claras y entiendo que todo lo que está pasando es legal y las normas lo permiten. Por eso no tiene sentido que nos quejemos. Lo que es mucho más importante para McLaren es que, pensando en 2021 y más adelante, debemos asegurarnos de que la cooperación entre dos equipos no va contra las normas intercambiando recursos", interfiriendo en un "terreno de juego equilibrado". "En 2020, es importante que las reglas se sigan. Hay limitaciones para las pruebas en túnel de viento o ‘CFD’ y entiendo que ya se están cerciorando de que ningún equipo transfiere su trabajo a otro, eso claramente iría contra las reglas", añade el jefe en un encuentro con medios.
"Eso iría claramente contra las normas y entiendo que la FIA y la F1 son conscientes", subraya Seidl, que amplía su postura: "Es importante para nosotros porque cuando el techo presupuestario se ponga en marcha, sea en efecto una limitación para todos. Hay ciertos apartados en los que no se puede cooperar con otro equipo". Y es que la aerodinámica, por ejemplo, debe ser original de cada escudería. Al margen del chasis, el dirigente de la escudería de Carlos Sainz también recuerda: "Como equipo independiente que no fabrica sus propios motores, es que, como recogen las reglas, haya paridad en los motores entre el equipo de fábrica y el equipo cliente". Racing Point quiere liderar el segundo escuadrón de la F1, algo que no encaja con el plan de futuro de McLaren: "Nuestra ambición es ser pioneros, que es lo que McLaren ha sido en el pasado. No queremos seguir a otros. Es evidente que en esta competición uno se debe fijar en lo que hacen otros como Mercedes, pero hay que crear ambición en el equipo, sin arrogancia, para llegar a hacer algo diferente en algún momento".
Unos test rodados
En lo puramente deportivo, la casa de Woking está sobradamente satisfecha con la primera semana de entrenamientos, superando la centena de vueltas todos los días, holgadamente, y cumpliendo con el plan de trabajo de Sainz y Norris. La semana que viene habrá más: "Estoy muy, muy contento con cómo ha ido todo hasta ahora por varias razones. Primero el número de vueltas y la fiabilidad, ha sido el mejor inicio de test de McLaren en mucho tiempo y eso es siempre una señal y una recompensa. También hemos cumplido con todas las tareas previstas cada día. Hasta ahora el coche hace lo que esperábamos de él y es bueno ver esa correlación. Hay un programa previsto con piezas nuevas también la semana que viene que nos permita extraer tantas prestaciones como sea posible al coche, pensando en Melbourne. En cuanto al rendimiento, aún es pronto. El coche está cumpliendo con lo que se esperaba".