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Fórmula 1: del circuito a la consola

Los videojuegos sobre el Gran Circo, que llevan produciéndose desde los 70, son cada vez más realistas y ofrecen una experiencia completa a los usuarios.

Fórmula 1: del circuito a la consola

El gran sueño de todo gran aficionado a la Fórmula 1 es probablemente sentirse como un piloto del Gran Circo. Conscientes de esto, las empresas de videojuegos llevan décadas sacando y mejorando juegos que permiten un control cada vez mayor de todo lo que rodea a las carreras, y han tenido un gran éxito en ello. Desde las primeras máquinas arcade en las que los jugadores tenían que quedar por delante del otro coche hasta la actualidad, en que el detalle de los videojuegos era inimaginable hace unas décadas, la animación se ha desarrollado mucho, y ofrece una experiencia lo más real y completa posible al usuario fiel, que nunca falta a su cita con estos videojuegos.

La evolución de los videojuegos ha venido de la mano de la evolución de las propias consolas. La primera fecha importante es la segunda mitad de la década de los 70, cuando se estrenaron dos juegos arcade que solamente ofrecían la posibilidad de superar al resto de coches en la carrera. Con el paso de los años, y cuando llegaron las primeras consolas personales y los ordenadores, los videojuegos de Fórmula 1 se fueron desarrollando y perfeccionando cada vez más. En 1984, Nintendo creó F1 Race, que incorporaba a personajes de la saga de Súper Mario, aunque el primer juego importante fue Formula 1, que se creó para el Spectrum, y que incorporó por primera vez los circuitos del Mundial de Fórmula 1. Unos años después, en 1988, el Grand Prix Circuit contaba con ocho de los escenarios de las carreras, pero permitía al usuario elegir entre tres coches: McLaren, Ferrari y Williams.

Los diferentes videojuegos no eran todos del mismo tipo. Así, F-1 Spirit, creado en 1987 por la factoría japonesa Konami, tenía como objetivo empezar en las categorías inferiores del automovilismo y llegar hasta el Gran Circo, y Winning Run, el último juego de la década, fue el primero en que se podían correr grandes premios en primera persona, lo que fue un antes y un después. Asimismo, varios pilotos aprovecharon el boom de los videojuegos para promocionar sus propios juegos. Fue el caso de Satoru Nakajima, Michael Andretti y, en los años 90, Ayrton Senna, que llegó hasta el punto de diseñar varias de las pistas en las que se podía correr y grabar algunos comentarios en el juego.

En los años 90 llegó la consagración de los videojuegos, que mantuvieron los avances de la anterior década y fueron más allá. Un juego importante en esta época fue Driver’s Eyes, desarrollado por Namco, y que era un simulador en 3D en el que se jugaba desde el punto de vista de los pilotos. Tres años después, llegó F-1 Sensation, el primer juego en el que se podían correr todas las carreras del Mundial tanto juntas como por separado, y posteriormente, Grand Prix Manager dio una vuelta de tuerca al permitir negociar los contratos y manejar las finanzas de las escuderías de Fórmula 1. La última fecha importante de la década de los 90 en cuanto a videojuegos fue 1996, cuando Sony desarrolló su primer juego de Fórmula 1 para la Play Station.

De Sony a Codemasters pasando por EA

Sony mantuvo la avanzadilla en el nuevo milenio, con la creación de un total de 14 videojuegos entre 1996 y 2006, y que se editaron para diferentes consolas. Estos juegos contaban con la licencia oficial de la Fórmula 1, y, como particularidad, al ser juegos para niños, censuraban toda la publicidad de marcas de tabaco que llevaban los coches en la vida real. Incorporaban casi todo: las paradas en boxes, los podios, la elección de los diferentes componentes de los neumáticos… En la primera parte de la década, sin embargo, el gigante japonés tuvo que enfrentarse a la competencia de EA, que, espoleada por su éxito con el FIFA, produjo seis juegos de Fórmula 1. Pese a esto, Sony mantuvo la hegemonía en la producción de videojuegos.

En 2009, tres años después de que Sony editase su último juego, la empresa británica Codemasters cogió el testigo, y sacó F1 2009, un videojuego para PSP, Wii y Apple que tuvo mucho éxito. Esto provocó que desde entonces y hasta la actualidad, Codemasters no haya faltado ni un año a su cita con el público, incluyendo coches antiguos y circuitos que ya no se utilizan actualmente. En 2012, la misma empresa estrenó F1 Race Stars, un juego en el que los pilotos de Fórmula 1 eran dibujos animados y que incorporaba también los karts. Finalmente, en 2019, y a espera de que Codemasters estrene la edición de 2020 de su videojuego, Hutch creó el juego F1 Manager para Android. En él, el usuario se pone al frente de un equipo y es responsable de su éxito o fracaso.