El punto débil de Verstappen sale a relucir a finales de 2019
A su mejor nivel de siempre, el exceso de valentía le ha costado puntos desde Bélgica y sus rivales le ven como un imán de los incidentes.
Max Verstappen completa en 2019 su mejor temporada en la Fórmula 1. Superará su récord de puntos casi con toda probabilidad, nunca había hecho poles y este año firmó dos y nunca había soportado sobre sus hombros el peso de un equipo como Red Bull con tanto éxito como en la campaña que está a punto de terminar. Con 22 años cumplidos a finales de septiembre y cien grandes premios disputados, ‘Mad Max’ está en su punto álgido como piloto y la sensación en el ‘paddock’ es que, a nada que su escudería le brinde un coche por opciones, luchará por el Mundial en 2020 y debe ser el gran rival de Hamilton a corto plazo.
El problema es que desde el parón de verano, el sorprendente y maduro Verstappen de principios de temporada se ha venido abajo. Tuvo accidentadas salidas en Spa, Monza, Japón y México que han limitado mucho sus puntos, se da la circunstancia de que el ‘rookie’ Albon suma más que él desde que están juntos sin haber subido siquiera al podio: 68 por 54. En Bélgica se fue a por Raikkonen y acabó en el muro, en Monza se saltó la primera chicane, en Suzuka le tocó Leclerc y en el Autódromo Hermanos Rodríguez fue demasiado duro con Lewis. Además está el error de la clasificación de México, apretando por una pole que ya era suya delante del Mercedes accidentado de Bottas, más la posterior reafirmación en sala de prensa, volvió a subrayar que el mismo piloto con más sobriedad ya estaría luchando, al menos, por un subcampeonato.
De hecho, cuando encadenó dos victorias y una pole antes de las vacaciones, entre Austria, Alemania y Hungría, estaba en disposición de asaltar el puesto de Bottas, mientras que ahora le ha superado Leclerc y le puede alcanzar Vettel, cinco puntos por debajo. Los pilotos ven a Verstappen como "un imán" de los incidentes y tanto Hamilton como Vettel han reconocido que le dejan más espacio que al resto porque a su lado, en una curva, pasan cosas.
"Soy un piloto duro, pero justo. Siempre es bueno que hablen de ti porque significa que estás en sus cabezas y sería una falta de respeto hablar mal de ellos en una rueda de prensa. Pero para quedarme detrás de ellos me voy a casa", respondió el holandés antes de firmar la paz con el hexacampeón británico y prometer menos críticas ante los medios. Verstappen es consciente de que con menos ruido alrededor y concentrándose en lo que sucede en la pista, su talento innato y su actual nivel de pilotaje le pueden llevar mucho más arriba.