Mercedes aprende a sufrir: "No ha sido un gran primer día..."
Nyck de Vries resume lo complicado que ha sido el estreno del equipo alemán en la FE, también el suyo, cerrando los tiempos y con problemas.
El '6' que ya han colocado en la puerta de su fábrica de Brackley indica una cosa, que nadie ha ganado más que ellos en los últimos seis años de la Fórmula 1, es más, nadie ha ganado nada. Allí, no les tose ningún otro equipo desde que la era híbrida comenzó en 2014, pero ahora Mercedes se adentra en un terreno nuevo para ellos, alejado de las dulces sábanas de la F1, y tienen que aprender a sufrir si algún día quieren tener el mismo éxito. La Fórmula E dio la bienvenida a los de la estrella con un golpe de realidad.
Sus dos pilotos, Vandoorne y De Vries, cerraron los tiempos solo por delante de Ma Qing Hua. "Desafortunadamente, no ha sido un gran primer día para nosotros", resume el holandés en una jornada dura especialmente dura para él: "Por la mañana hemos tenido algunos problemas y tuvimos ninguna tanda apropiada, además, hemos comprometido la mayoría de la tarde por cosas similares y diferentes y solo pudimos dar dos vueltas. No ha sido lo ideal, pero esperemos que podamos sacar librarnos de todos esos problemas y seguir adelante".
Nyck se quedó a dos segundos de Bird (Stoffel, a 1.8), un jarro de agua fría para el campeón de la F2 que, eso sí, no le quita ni un ápice la ilusión de competir en el certamen eléctrico: "No voy a mentir, cualquier piloto joven sueña con llegar a la F1, pero ahora el mercado está muy cerrado y creo que esta era una buena dirección. La FE es una de las grandes categorías del momento, no hay ningún otro campeonato con tantas marcas y el nivel de los pilotos es muy alto". Tras dar 13 vueltas en seis horas, solo pide una cosa: "Poder dar más mañana".