Verstappen ya señala a Honda

Quien conoce a Verstappen en el 'paddock' de la F1 y trata con él con mayor frecuencia empieza a apreciar síntomas de inquietud, cada vez más cerca del hartazgo, a la espera de que Honda entregue a Red Bull un motor competitivo, con el que aspirar a ganar carreras. Porque al empezar la temporada el holandés no tenía dudas, detrás de Mercedes y Ferrari estaba su propulsor, pero ahora empieza a despejar cuando le toca valorar quién está ganando la partida entre la unidad de potencia japonesa y la de Renault.

El monoplaza energético montó la segunda evolución de Honda en Azerbaiyán y la tercera el pasado fin de semana en Paul Ricard. "En Francia perdimos mucho tiempo en las rectas, aunque tampoco estábamos extrayendo el máximo de nuestras prestaciones", dice el holandés, y cuando toca apunta al motor: "En la primera vuelta nos falta algo, los McLaren eran muy rápidos en recta, Renault a una vuelta tiene un modo de clasificación con mucha potencia".

"El equilibrio del coche no es malo, tenemos que ganar prestaciones y dar un paso grande también con el motor", puntualiza ‘Mad Max’. En el segundo sector de Le Castellet, el de la gran recta separada por una chicane, Renault hizo la velocidad punta más alta en clasificación (Ricciardo, 342,5 km/h) y Honda, la peor (Kvyat, 329,4 km/h). Ninguno de los pilotos que montaba la ‘spec-3’ nipona superó a los coches con propulsor galo en ese apartado. Tanto McLaren como el equipo oficial se están acercando a Red Bull a una vuelta, la pasada de Ricciardo a Gasly en carrera es la mayor evidencia.

Para Verstappen no son una preocupación: "McLaren está haciendo un mejor trabajo en comparación con el inicio de la temporada. Claro, cuando estás tan atrás es más fácil cerrar parte de esa desventaja encontrando unas décimas. No preocupa, en carrera somos mejores y más fuertes". Lo que sí empieza a preocupar es el margen de mejora de Honda. Con tres motores, estrenados, el próximo traerá penalización y si los cambios no traen progresos de rendimiento, sólo de fiabilidad, ningún piloto las aceptará de buen grado. "Vendrán más cosas", augura el piloto de 21 años.

Y este fin de semana llegan al circuito de casa, el Red Bull Ring, plagado de rectas y con sólo diez curvas. "Muchas rectas y pocas curvas para recuperar, y eso si es que recuperas", aclara. Hace un año ganó Verstappen en Austria, su equipo venció cuatro carreras a lo largo de 2018 y acabaron la temporada con el mejor chasis, superando a Mercedes por prestaciones puras en varios trazados. Dijeron que cambiaban a Honda para subir a lo más alto del podio, de momento suman dos terceros puestos. Y aunque desde la escudería todavía señalan a la aerodinámica como principal fuente de problemas, quizás para ocular las carencias del motor, cada vez les resulta más complicado defender esa tesis…