Casi la mitad de la parrilla aún está con la resaca de Le Mans
9 de los 22 pilotos corrieron allí: Buemi ("Sigo estando feliz"), 'Pechito' ("Fue muy duro"), Vergne ("Íbamos líderes y algo se rompió")...
186 pilotos en 62 coches. Esos números dejó la enorme parrilla que se formó en Le Mans para disputar las 24 Horas que cerraron la Supertemporada del WEC el pasado fin de semana. Hubo pilotos que corrieron el Mundial de Resistencia al completo y otros que solo se apuntaron para la cita más grande de todas, y entre tantos participantes, y de tantas diversas procedencias, la Fórmula E estuvo muy bien representada. Casi la mitad de los protagonistas del campeonato eléctrico, 9 de 22, estuvo dando vueltas al circuito de La Sarthe.
El que acabó más feliz de todos ellos fue, claro, Buemi, quien junto a Alonso y Nakajima ganó la carrera por segunda vez seguida y se coronó campeón del WEC. Ahora en Suiza, su casa, aún tiene reciente el sabor de la victoria y lo disfruta: "Le Mans, fue increíble. Triste para nuestros compañeros, pero es parte del automovilismo, yo sigo estando feliz por la victoria". Sí, sus compañeros, los del Toyota 7 que se quedaron sin ganar por un pinchazo y entre los que estaba 'Pechito' López, que sigue dolido: "Cuesta, cuesta… pero ya estoy un poco mejor".
"El hecho de tener esta carrera te ayuda a sacar un poco la cabeza de Le Mans", reconoce a AS. También nos cuenta lo mal que lo pasó: "Fue muy duro, muy duro. Estaba muy feliz de estar en el coche para terminar la carrera y, cuando salí por segunda vez de boxes con el pinchazo, me di cuenta de que estaba todo perdido". Y que no le hubiera gustado que le dieran la victoria por órdenes en Toyota: "No, desde mi punto de vista como piloto nunca habría permitido eso. Nosotros perdimos la carrera, el coche 8 no hizo nada para tener que devolver la posición".
Dejando de lado a los pilotos de Toyota, que aquí son de Nissan (Buemi) y Dragon ('Pechito'), otro piloto de la FE que acabó en el podio de LMP1 con SMP Racing fue Vandoorne. "He hecho dos carreras en el WEC y las dos he acabado en el podio. El objetivo era acabar terceros y el rendimiento fue muy bueno", nos cuenta el de HWA. Un final feliz que no tuvieron Vergne y su G-Drive de LMP2: "Algo se rompió. Íbamos liderando por dos minutos y perdimos 20 por eso… Es algo extremadamente difícil de llevar, el automovilismo es cruel a veces…".
Hemos repasado la carrera de cuatro, quedan cinco: Lotterer (DS Techeetah) quedó cuarto en LMP1 con Rebellion; Dillmann (NIO), abandonó en la misma categoría con ByKolles; Da Costa corrió con un BMW, como en la FE, y fue décimo en LMGTE Pro, donde también encontramos a Lynn (Jaguar), 12º con un Aston Martin, y a Bird (Virgin), compañero de Molina en el Ferrari 71 que no acabó la prueba. Pilotos que comparten un mismo universo, que coincidieron en la carrera más legendaria, y que tuvieron resultados... dispares.