Gana McPhee y podio de Canet aguantando en pie de milagro
Clásico final de carrera en grupo de Moto3, con el escocés manteniendo a raya a Dalla Porta y con el español superando a Toba para el tercer puesto a cuatro curvas del final.
Qué bonito es Moto3, la categoría pequeña del campeonato por cilindrada, pero enorme por emoción y diversión. La carrera de Le Mans fue la típica de final de infarto, con McPhee logrando mantener a raya en la última vuelta a Dalla Porta y con Canet superando a Topa a cuatro curvas del final y aguantando en pie de milagro. Y antes de eso, por supuesto, pasaron muchas cositas…
Lo más llamativo fue el elevado número de caídas. Hasta once se contabilizaron en el resbaladizo circuito de Le Mans, y eso que la carrera fue en seco, a pesar de un leve chispeo durante la prueba. García, Ogura (su moto regresó peligrosamente a la pista y la pudieron esquivar todos), Binder, Ricardo Rossi, Ramírez, Antonelli, Pérez, Arbolino, Suzuki, López y Foggia. Y pudieron ser más, porque estuvieron a punto de caerse en la penúltima vuelta Masiá, Migno y Rodrigo, y en la última se mantuvo sobre su KTM como pudo Canet, haciendo bueno así el ajustadísimo adelantamiento que le había hecho a Toba, el ganador de Qatar, que se mostró enfadado con el español en la vuelta de honor.
El pupilo de un Biaggi que perdió ayer a su padre, salió extra motivado para ofrecer a su abuelo Alfonso, fallecido el martes, un buen resultado, lo que logró a base de casta. Su moto no era la que más corría en la recta, pero se las apañó desde la cuarta plaza para preparar un ataque final por la tercera plaza, porque no tenía moto para más esta vez. Ese tercero le hace salir más líder del GP de Francia, porque el de Corbera llegó con un punto de ventaja sobre Antonelli y ahora se va con 14 sobre Dalla Porta, que no pudo en la última vuelta con un McPhee que logró ganar desde la pole. Y eso no sucedía en esta categoría en este circuito desde 2013, con Maverick.
El que hizo un carrerón fue Masiá, que salía 23º y cruzó la meta octavo, pero acabó duodécimo al sufrir una sanción de 2.2 por saltarse en la decimotercera vuelta las curvas 3 y 4, la primera chicane. Raúl Fernández, por su parte, recuperó diez posiciones la terminar décimo, lo que tiene mucho mérito porque estaba tocado en la rodilla izqyuierda y en el pie por la fractura en un metatarso. Su compañero Arenas acabó undécimo.