Elías: “Ahora soy cambiador de pañales, pero igual de rápido"
Es estrella en el MotoAmerica de SBK, y dice: "En Suzuki estaban un poco preocupados con esto de que fuera padre, pero ven que no ha pasado y están contentos".
MotoGP comparte paddock en el GP de Las Américas con el MotoAmerica de SBK en el que compite nuestro Toni Elías a sus 36 años. El campeón de 2017 de este campeonato y subcampeón del año pasado, ha firmado la pole de este fin de semana y eso que no hace ni un mes que ha sido padre por vez primera. Otro que echa por tierra la leyenda del mítico Enzo Ferrari…
-Hay que felicitarle antes que nada por su reciente paternidad. ¡Toni Elías es papá!
-¡He hecho la pole! (Y se parte de risa). Ahí he hecho la pole de verdad. Estoy muy contento. Mi hijo nació el 16 de marzo y antes estaba un poco preocupado, porque la gente en general es muy negativa. Todo el mundo me decía que mi carrera ahora se iría para abajo, pero la verdad es que no he notado alas, sino al revés.
-¿Le ha dado alas?
-Muchas.
-Eso se lo decían por la teoría del mítico Enzo Ferrari, que decía que un piloto perdía un segundo por vuelta al convertirse en padre…
-Es una leyenda que quizá era real años atrás, pero si tienes una buena moto y un buen equipo eso no pasa, sino al revés. Nada más tenerlo, fui a hacer un test y ya supe que hay algo ahí por lo que tengo que trabajar duro. Este tío me necesita. Y así fue. Pude hacer un gran test, empezar bien el campeonato y dedicarle la victoria en Atlanta, donde fui segundo y primero. Me siento muy feliz y eso se nota encima de la moto. Sí es verdad que en Suzuki estaban un poco preocupados con esto de que fuera padre, porque un tío que les ganaba carreras iba a ser padre y pensaban que me iba a echar a perder, pero ven que no ha pasado y están contentos.
-¿Tenía muy claro que el chaval se iba a llamar Toni Elías?
-Sí, es el cuarto Toni Elías de la familia. Mi abuelo, mi padre, yo y él.
-¿Le gustaría que fuera piloto?
-Sé que él va a escoger y si quiere hacerlo lo va a tener fácil, pero espero que no porque yo sufriría un montón. Es una cosa que no está en nuestras manos.
-Este es un Toni Elías estadounidense, ¿no?
-Sí. Él es americano, como su madre, pero tendrá doble nacionalidad y fácil para ir a casa y para volver aquí para trabajar duro.
-Se le ve muy integrado en Estados Unidos. ¿Cuánto tiempo lleva ya aquí?
-Este es el cuarto año. Necesito mejorar aún el inglés.
-Mal no se le da, porque está en un buen equipo, ha conquistado a una mujer de aquí y ya tiene un niño estadounidense…
-La verdad es que estoy muy contento aquí. He encontrado mi sitio. Eso no quiere decir que no eche de menos a mi familia de casa. Vienen a verme cuando pueden y yo, por temas de la green card, no me pude mover mucho ni el año pasado ni éste.
-¿Es de los que siente mal vistos por el presidente Trump?
-No. Yo creo que, en general, está mal visto el presidente, pero la gente de aquí está contenta con él. Si vemos la parte negativa, no es más por un tema de extranjeros sino por un tema de delincuencia. Lo que quieren es tener la delincuencia interna controlada y esto bueno, tanto que debería ser un ejemplo.
-Me sorprende que diga esto. Está súper integrado.
-Cada uno piensa lo que quiere pensar. Algunos piensan que es negativo, pero también porque lo que sale fuera es lo negativo. A veces hay que pensar también en la seguridad de donde vive uno. Y ostras, aquí todo está seguro y hasta la economía está más estable. Yo quiero mucho a mi tierra, pero el tema está delicado en general en España y Cataluña. Yo paso de la política y lo que quiero es el bien de mi gente y no quiero ver a mi gente sufrir. Me gustaría que estuvieran contentos, felices y seguros como estoy yo aquí.
-¿Qué queda del Elías niño que llegó al Mundial en 2001 y al que yo llamaba el niño de la eterna sonrisa?
-La única cosa que ha cambiado de ese niño es que ahora es padre, tiene una mujer y está más centrado. Si vienes media hora conmigo vas a ver que soy el mismo loco. (Se parte de risa).
-Se ha hecho un hombre sin dejar de ser un niño, algo que comparto. ¿Dónde está aquí su residencia?
-Al lado del aeropuerto de Los Ángeles, en una playa que se llama Hermosa Beach. Está a quince minutos de Santa Mónica, que es la turística. La mía es más tranquila.
-¿Cómo pasa el tiempo allí cuando se dedica a la moto?
-Ahora cuidando de mi niño, cambiando muchos pañales. Me he convertido en el cambiador oficial de pañales de la casa. (Se ríe otra vez). Y la verdad es que me encanta. Cuando no hago eso, estoy entrenando, porque con un niño de por medio es un cambio grande, pero mi mujer sabe que tengo que entrenar duro para mantener el nivel. Los dos somos surfistas y me paso horas en las olas, que se han convertido en mi nuevo entreno. Lo paso bien entrenando y me reviento de respirar y de nadar.
-¿Se le da bien?
-Cada vez se me da mejor, pero es muy difícil. Cuando está encima de la tabla y empieza a mejorar se cree el Slater, pero cuando luego te ves en foto dices: “¡Soy un patata! ¡Soy el tío más malo y me queda mucho por aprender!”.
-O sea, hay que molar en la foto. Ahí es cuando se sabe que uno es bueno, ¿no?
-Exacto. Y no quedo bien, quedo fatal.
-Hábleme de su campeonato. Lo ganó en 2017 y fue subcampeón en 2018. ¿Y ahora?
-El año pasado iba liderando, pero se fue todo al garete con el cambio del reglamento para los neumáticos. Parecía que lo iba a ganar todo, pero se fue al garete todo en tres o cuatro carreras. Remontamos, pero ya era tarde para ganar, y aprendimos para este año, que está muy fuerte el campeonato con cinco o seis tíos que pueden ganar carreras: Beaubier, Gerloff, Herrin, Scholtz, Beach y yo, pero van a aparecer más, porque hay una Ducati que cada vez está más cerca. Son diez citas con veinte mangas, que son muchas. Hay que estar súper alerta y no fallar.
-¿Qué repercusión tiene?
-Lo más chulo es que los americanos conocen Indycar, Nascar, Supercross, NFL y NBA, pero no saben lo que es SBK y el que canal que retransmite todo lo que ellos conocen, la FOX, retransmite ahora también nuestro campeonato.
-¿Para cuánto tiempo tiene cuerda aquí?
-Tengo 36 y espero tirar hasta los 40, 41 o 42. ¿Por qué no? Si tengo una buena moto y me siento bien…
-¿Está al tanto del Mundial de MotoGP y de SBK?
-Sí. Sé que Álvaro (Bautista) lo está petando y me encanta, porque es un tío que ha estado en la situación que yo, saltando de satélite en satélite, con el gran cuarto del año pasado cuando le dejaron la Ducati oficial en Australia. Está volando y espero que siga así. Me pone contento verle feliz, porque sé lo que es. Y claro que sigo MotoGP, porque sigo todo, también el Supercross y la F1. Controlo de todo.