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F1 | WHITING | EL PERFIL

El hombre de los pilotos

Charlie Whiting llegó a la F1 en los años 70 y fue mecánico de Hesketh o Brabham. Ricciardo, Vettel y Sainz hablan del británico, fallecido este jueves.

Melbourne
Charlie Whiting, junto a varios pilotos en Brasil 2016.
MIGUEL SCHINCARIOL

Charlie Whiting, nacido en Kent hace 66 años y fallecido este jueves en Melbourne por una embolia pulmonar, llegó a finales de los años 70 a la Fórmula 1 y se inició como mecánico de Hesketh antes de pasar a Brabham, el equipo de Bernie Ecclestone. Su experiencia le valió en 1988 el ascenso a la FIA como Delegado Técnico en la Fórmula 1 y desde 1997 se desempeñaba como Director de Carrera de la F1. El hombre que decidía cuándo se corre, cuándo se para, cuándo sale el coche de seguridad, cuándo se sanciona una maniobra, cuándo un adelantamiento es válido, cuando un piano es demasiado peligróso o cuándo se suspende la carrera.

Por eso, hacia él se dirigieron muchas ironías y quejas encubiertas por parte de los pilotos, incluso una vez le tocó escuchar un "a la mierda" propagado a través de la radio por un tetracampeón del mundo de F1, aunque públicamente el dirigente británico nunca perdió los nervios ni la compostura. Era el peaje que debía pagar por resolver cualquier polémica. Al fin y al cabo, él siempre se comportó como un garante de la seguridad en la pista.

"Hablé con él ayer, fuimos caminando por las primeras curvas del circuito y es difícil aceptar que alguien ya no está. Era el hombre de los pilotos, siempre pendiente, preguntando y abierto en cualquier momento con cualquiera de nosotros. Y un gran tipo”, dijo Vettel en la rueda de prensa oficial. Ricciardo lo corrobora: "Era nuestro hombre, le presionamos mucho, duro, le hemos hecho trabajar, pero siempre ha sido asertivo y nos hizo sentir siempre que estaba de nuestro lado”.

A Carlos Sainz le sorprendió la atención de Whiting en su año de 'rookie': "Yo no podía decir mucho, estaba para aprender, pero me gustó cómo vino a hablar conmigo después de varias carreras a decirme lo bueno que era para la F1 que llegásemos pilotos como Verstappen o yo, y que metiéramos el morro de nuestro Toro Rosso a Red Bull o Ferrari. Me dijo que siguiésemos así, que no nos amedrentaran. Pero era otra forma de venir a decir que nos calmáramos". "Hablamos este invierno para mejorar la F1 con la relación entre pilotos y comisarios. Tenía ganas de verle en el viernes por la tarde y no verle será duro", dice el madrileño.

Desde su cargo, Whiting se reunía todos los viernes con los pilotos. "No espero que nadie venga y me diga que ha sido un gran premio muy bien dirigido, así que si nadie se queja sobre algo, buena señal", afirmaba hace pocos años Whiting, haciendo de la discreción una habilidad. En las últimas temporadas fue uno de los principales defensores del 'Halo', instalado desde 2018 como dispositivo de seguridad pasiva en todos los monoplazas. De eso habló Hamilton: "Charlie ayudó mucho a este deporte y permitió avanzar a los pilotos en muchas áreas y en seguridad". Y Kubica: "Le vi charlando con Vettel ayer y no quise interrumpir, podía hablar con él el viernes. Desafortunadamente, eso ya no será así".