Carlos Sainz, orgulloso 'finisher': "Lo fácil habría sido retirarse"

No acabó en el top-10 por la penalización al salir tres horas tarde en la novena etapa, pero Carlos Sainz sí cumplió el otro objetivo previsto para este Dakar: ganó una especial, la última, al menos se marcha del raid con ese buen sabor de boca: "He podido disfrutar un poco, no tuve ningún problema y era importante acabar la carrera".

"Lo fácil era haberse retirado el tercer día o el de la dirección asistida, pero estoy contento por haber acabado y estar aquí, creo que intentar seguir y seguir aprendiendo ha sido la buena decisión", dice el madrileño, que desde el momento que decidió seguir la única forma de hacerlo era implicarse a fondo: "Me ha ido bien en la vida así y no voy a cambiar ahora por muy veterano que sea".

Su coche, el Mini JCW Buggy, mostró potencial ganando tres etapas de diez, pero también problemas de juventud en su segundo Dakar: "Tiene potencial, pero hay que perfeccionar cosas y solucionar problemas que hemos tenido, sobre todo el inflado y desinflado en un dos ruedas motrices porque es imposible correr en un rally de cien por cien arena si ese sistema no funciona".

Sobre la carrera, cierta crítica al paisaje, idéntico durante todo el rally: "Ha sido un Dakar en el que me ha dado la sensación de que estuvimos siempre en el mismo tramo, he visto siempre el mismo tipo de arena y dunas. Faltó variedad y es importante, que haya un poco de todo. ¿Consejo? Perú, Chile Argentina. Y desde luego el 'roadbook' da para hablar".