Libres 2: Hamilton domina con Alonso atrás con el McLaren
El líder del Mundial le sacó ocho décimas a Vettel con el Ferrari, mientras Sainz fue decimocuarto y el asturiano, decimoséptimo.
Llovió en la noche, poco, no tanto como se esperaba. El tifón, uno de los de cada año por Suzuka se desvió y ha terminado acariciando esta ciudad que siempre parece al borde de la catástrofe. Pese a todo, el cielo estaba nublado y el ambiente era frío aún con los 19 grados y los apasionados aficionados japoneses a la F1. Quizá porque parece que esto está acabando, no en tiempo, aún queda más de un mes, sino en sensaciones. Y más después de comprobar la superioridad del Mercedes desde hace un par de grandes premios que tiene pinta de confirmarse en el país asiático.
Ocho décimas. Un segundo. Esa es la diferencia del Ferrari más rápido, el de Sebastian Vettel, y el más competitivo de los Red Bull, pilotado por Max Verstappen, con respecto al mejor Mercedes, el que lleva Lewis Hamilton, cuatro veces campeón del mundo, líder del Mundial y el piloto que ha dominado las dos sesiones de entrenamientos libres del GP de Japón.
El británico además está disfrutando dentro del coche y lo demuestra continuamente, mientras Vettel terminó la sesión quejándose de una vuelta sin sentido para su equipo. La energía que desprende el líder del Mundial es superior y aquí se siente mucho ese asunto de la mística.
Mientras, los españoles siguen en su particular cruzada por aparecer y por no desaparecer del todo, al menos en la clasificación, porque nunca será así en el corazón de los aficionados japoneses. En los libres, Sainz terminó decimocuarto con el Renault y Alonso decimoséptimo con un McLaren tan pobre como en Rusia. El madrileño espera poder meterse en la Q3, pero el asturiano lo tiene prácticamente imposible a pesar de que le sacó… un segundo a su compañero de equipo, Vandoorne. Pero en la clasificación por el cariño de los japoneses, Sainz está postulándose para el futuro y Alonso es el auténtico emperador de Japón, lo de samurái quedó atrás… Quizá porque son muchos los que saben que si alguien podría plantar cara a un Hamilton estelar es este genio astur que está diciendo adiós a la Fórmula 1.
