"¿Alonso sin frenos? Forma parte de la magia de estas carreras"

Tiene pinta de torero antiguo Antonio García, como un Bienvenida despeinado después de estar más de nueve horas al volante. No pudo esta vez conseguirlo, por poco, como su tocayo Antonio esa vez que se encerró con doce toros en Las Ventas, se quedó en el noveno. Esfuerzos de resistencia, también de nuestro torero, perdón piloto, mas americano.

Además, el madrileño es amigo de Fernando Alonso, al que también espera encontrarse en Le Mans. De momento ha visto bien aquí al asturiano, aunque la pregunta del periodista encierra la palabra desastre. “Desastre no, así son estas carreras. En cuanto a resultado es otra cosa, pero es normal. Creo que para él ha sido una gran experiencia. Empezamos a competir juntos, catorce años de nuestra carrera deportiva lo hicimos juntos y ahora le veo disfrutando. Estuve el año pasado con él en Indianápolis un par de días y creo que ahí ya se llevó un shock de cómo son las carreras en Estados Unidos, descubrir el ambiente, el respeto que hay aquí, es distinto a Europa que necesitas guardaespaldas. Le gustó mucho y ahora al tener esta oportunidad no ha dudado y aquí ha estado corriendo como uno más”, explica.

Fernando se quedó sin frenos a final de recta, algo que impresiona a cualquiera, pero no tanto a Antonio: “He estado pendiente, leyendo de vez en cuando cosas y le ha pasado algo parecido a nosotros. Es como cuando llueve y te cae el aguacero en medio de la noche, es parte de la competición. En Le Mans igual cae una cortina de agua que no te esperas, hace tres o cuatro año hubo una hecatombe, forma parte de la magia de estas carreras”.

Ampliar

Y encuentra un culpable a todo esto, las pocas neutralizaciones. “Lo de Fernando, al final es eso. Parte del punto este de que no haya habido neutralizaciones ha provocado más problemas, con bandera amarilla los mecánicos echan un vistazo extra cuando hay algo fuera de lo normal, frenó un poco justo o algo, pierdes pasar a la cola del pace car, pero puedes cambiar los cuatro discos de frenos y pastillas y no pasa nada. Estando tanto tiempo en bandera verde te obliga a ir al cien por cien, minimizar al máximo las paradas, ruedas, gasolina, frenos... Y eso le ha pasado a Fernando y a nosotros, cuando estás un poco por detrás. Cuando gané en 2009 perdimos tres vueltas por una salida de pista y las recuperamos en tres horas. Esto es así”.

Antonio fue el mejor español, demostró que conoce esta carrera y que es un talento, pero… no estaba feliz: “El tema es cuando lo tienes tan cerca también duele, en un podio de Le Mans o Daytona, ves al primero superfeliz y al segundo con un enfado grande, como nos pasó el año pasado al perder Le Mans o esta carrera por dos centésimas como perdí en 2016. Pero al final no es nada extraño, represento a un marca, otra marca ha sido mejor, nos han ganado, pero está claro que mi trabajo es este, yo estoy muy contento con el equipo”. Próximo reto, Sebring, y mientras Antonio recordará cuando jugaba en San Martín del Castañar, en la plaza rectangular, la que dicen es la más antigua del mundo.