Andreas Mikkelsen vuelve a dominar en las antípodas

A Andreas Mikkelsen le sienta bien estar en la otra punta del mundo. El noruego, ganador el pasado año en el Rally de Australia, vuelve a dominar este año con claridad la clasificación en las antípodas tras la primera etapa. Ha sabido sacar ventaja de su retrasada posición de salida para abrir hueco con sus rivales, aprovechando que se encontraba los caminos limpios de gravilla.

A pesar de que había previsión de lluvia, no llegó a caer, por lo que los caminos forestales cercanos a Coffs Harbour estaban secos, polvorientos y llenos de gravilla. Un problema para el ya pentacampeón, Sebastien Ogier, que abría pista y era el que más suciedad encontraba a su paso. Además, el francés ha sufrido problemas con las levas del cambio que le han martirizado durante toda la jornada. Es octavo, y se ha descolgado a 47 segundos del líder.

Mikkelsen partía noveno, por lo que tras el paso de ocho coches se encontraba las pistas mucho más limpias. Lo ha aprovechado a la perfección, como ya hiciera en la primera etapa del Rally de España, y se ha encaramado líder con solidez tras ganar cinco de los ocho tramos del día. Su ventaja sobre el segundo clasificado, Thierry Neuville, que se juega el subcampeonato con Ott Tanak, es de 20 segundos. Los Hyundai no sólo copan las dos primeras plazas, sino que han ganado en todas las especiales del día, ya que Neuville ha sido el más rápido en las tres restantes.

Kris Meeke, que es otro que sale retrasado, es tercero a 7 décimas del belga. El británico perdía tiempo al sufrir una ligera salida de pista, pero se mantiene en la lucha, que está muy cerrada entre los siete primeros, separados por menos de 20 segundos.