Hace hincapié Emilio Alzamora en que la entrevista que concedió a As en el paddock de Sepang es la primera que realiza en todo el año. No es el ilerdense muy amigo de entrevistas y de acaparar la atención informativa. El mentor de Marc Márquez es más de trabajar en la sombra y ahora saborea como su discípulo más aventajado, al que lleva ligado desde que tenía diez años (2003), está a las puertas de conquistar su sexta corona mundial, la cuarta en la clase reina con sólo 24 años. Ha sufrido como el que más cada una de las 25 caídas que ha protagonizado el del Repsol Honda y tiene muy claro que "no han sido gratuitas".
—¿Cómo es posible que hayamos pasado del Mundial más igualado de la historia hasta no hace mucho a uno con una bola de título tan clara para Márquez en la penúltima carrera?
—¿Cómo lo ha conseguido?
—Llegó a estar en un par de ocasiones a 37 puntos del liderato. ¿En qué momento de la temporada se dan cuenta de que puede revalidar el título?
—El año pasado quedó muy claro que fue un título más de piloto que de mecánica en el que Marc le ponía lo que le faltaba a la Honda. ¿También lo sería éste?
—¿Costará mucho lograr que piense en Sepang más en el Mundial que en la carrera?
—¿Cómo se viven en el box esas 25 caídas que acumula durante toda la temporada?
—¿Le sorprende que haya sido Dovizioso el rival que más batalla haya plantado? Era el que menos cartel tenía de todos los posibles…
—Resulta muy difícil este año hacer un podio de las mejores carreras porque ha habido muchas. ¿Cuál es la que más le ha impactado de todas las protagonizadas por Marc?
—El año que viene habrá batalla en la pista y fuera de ella, por conseguir buenos contratos para 2019. Imagino que ser el representante de Márquez facilitará mucho las cosas en ese sentido, ¿no?